Durante buena parte del día, mientras la alcaldesa Claudia López hacia perifoneo por dos de las cinco UPZ que estarán en alerta naranja, en la Capital del país se presentaron varias manifestaciones que, posteriormente, tuvieron que ser dispersadas por la Fuerza Pública.

De hecho, varias de las manifestaciones que se unieron y comenzaron a avanzar por la Carrera 7 con calle 28 al sur, en un principio estuvieron acompañadas por la fuerza disponible de la Policía, pero en la jornada hubo, de todas maneras, una serie de enfrentamientos.

Adicionalmente, tras la jornada de ayer, el mobiliario y la infraestructura de algunas estaciones de Transmilenio de la ciudad, sufrieron vandalismo y ahora deberán ser recuperadas por el Distrito.

Rechazo

“Supuestos jóvenes inconformes terminan siendo vándalos encapuchados. Además de causar aglomeración, vandalizaron estaciones, paraderos y comercios. Esto no es protesta legítima de ningún tipo. Es vandalismo organizado para beneficio político de extremistas que no vamos a permitir”, precisó ayer en horas de la tarde la Mandataria de Bogotá.

Por su parte, el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, refirió que dichas acciones carecían por completo de sentido, a la vez que argumentó que en estos momentos los recursos públicos del Distrito no deberían destinarse a reparar los daños producidos por acciones vandálicas. Adicionalmente, las protestas de ayer tuvieron que ser aminoradas por presencia de la Policía Metropolitana de Bogotá.

“Estás acciones de “protesta” a esta hora, en la calle 26 con vandalismo, pierden cualquier sentido. Los recursos públicos en estos momentos deben destinarse a quienes más lo necesitan, no a reparar infraestructura pública vandalizada irresponsablemente”, precisó por su parte el secretario Gómez.

Al respecto de la presencia de uniformados, la Secretaría de Gobierno explicó que, “tras varios hechos vandálicos en medio de la protesta, la Policía Metropolitana de Bogotá intervino para evitar desmanes. Se hicieron requisas y se encontraron varios artefactos. Los sospechosos fueron conducidos a la estación de Policía y estuvieron presentes los gestores de Diálogo social y convivencia”, enfatizó ayer Gómez, quien hace algunos meses había explicado la presencia de los gestores en las movilizaciones.

Por su parte, el pasado nueve de junio la Alcaldesa ya había dicho que ella no podía prohibir las marchas y/o manifestaciones, pero desde aquel entonces hizo un llamado a que no se convocaran este tipo de encuentros, pues aglomeraciones como estas atentan contra todos los protocolos de bioseguridad para contrarrestar la propagación del coronavirus.

Aglomeraciones

“Por decisión constitucional, las alcaldías no tenemos la facultad de autorizar o prohibir marchas, pero invitamos a la sensatez. No es responsable convocar aglomeraciones en este momento. Literalmente arriesga la vida de los participantes y la salud pública de la ciudad”, precisó en aquel entonces la Alta funcionaria.

Aun así y a pesar de eso, ayer hubo manifestaciones con afectación vial en el bunker de la Fiscalía General de la Nación, en donde alrededor de 200 personas se conglomeraron a manifestar, entre otras cosas, por la muerte de Dylan Cruz. Hubo presencia de la Policía Metropolitana de Bogotá por la avenida La Esperanza.

También hubo manifestaciones y un plantón en el Museo Nacional, así como en la sede tecnológica de la Universidad Distrital.