
La Corte Suprema de Justicia negó la solicitud de libertad condicional presentada por el exmagistrado Gustavo Malo Fernández, condenado a nueve años de prisión por su participación en el escándalo de corrupción conocido como el "Cartel de la Toga". La decisión se fundamentó en la gravedad de los delitos cometidos, los cuales, según el alto tribunal, socavaron la integridad del sistema judicial colombiano.
A pesar de que el pasado 17 de febrero la Cárcel y Penitenciaría de Alta y Media Seguridad Para Miembros de la Fuerza Pública (EJEPO) emitió un concepto favorable para otorgar el beneficio, la Sala Especial de Primera Instancia consideró que la liberación de Malo afectaría la percepción de justicia en la ciudadanía. "Los delitos por los que fue condenado no solo tuvieron repercusiones individuales, sino que socavaron el sistema judicial en su conjunto, generando un daño estructural", señaló la Corte en su decisión.
Rebaja de pena por estudios en teología
Si bien la libertad condicional fue denegada, el exmagistrado recibió una rebaja de pena de dos meses y nueve días por su participación en estudios virtuales de teología y encuentros bíblicos dentro del centro penitenciario. De acuerdo con la sentencia, estas actividades han permitido que Malo "mantenga un equilibrio ocupacional, logrando disminuir los efectos de la prisión".
Hasta la fecha, Malo ha cumplido el 74,85% de su condena, lo que equivale a siete años y tres meses de reclusión. Sin embargo, aún le restan dos años, cinco meses y ocho días de prisión.
Un magistrado salvó su voto
La decisión de negar la libertad condicional no fue unánime. El magistrado Jorge Emilio Caldas se apartó del fallo argumentando que este tipo de beneficios fomentan la reinserción social y motivan a los reclusos a cumplir con su proceso de rehabilitación. "El subrogado de libertad condicional tiene un doble significado, tanto moral como social, pues estimula al condenado que ha demostrado su readaptación", sostuvo.
Caldas resaltó que Malo ha cumplido con el tiempo mínimo requerido para acceder al beneficio, superando el 60% de la pena exigido por el artículo 64 del Código Penal. Además, destacó el arraigo familiar y el proyecto de vida que ha construido el exmagistrado tras su condena. "No se trata de desconocer el daño causado a la administración de justicia, pero tampoco se pueden ignorar los derechos consagrados en la ley", concluyó.
Las condenas en firme del 'Cartel de la Toga'
El caso de Gustavo Malo es uno de los procesos más emblemáticos del 'Cartel de la Toga', una red de corrupción en la que altos funcionarios judiciales alteraban decisiones en favor de políticos y empresarios a cambio de millonarias sumas de dinero. Además de Malo, la Corte Suprema confirmó la condena de 16 años y cinco meses contra el expresidente de la Corte, Francisco Ricaurte, quien también enfrenta procesos por manipulación de casos de parapolítica y corrupción.
Según la investigación, Gustavo Malo recibió $1.200 millones de pesos para interferir en el proceso por concierto para delinquir con grupos paramilitares contra el exsenador Álvaro Ashton. Su actuación en este esquema le valió la declaración de "indigno" por parte del Senado en 2018 y su condena en 2021 por haber conformado una "empresa criminal" destinada a entorpecer investigaciones en la Corte Suprema.
A pesar de la negativa a la libertad condicional, la defensa de Malo y de Ricaurte han presentado recursos de casación para intentar anular sus condenas, sobre lo cual la Corte Suprema aún no ha tomado una decisión definitiva.