Luego de tres meses de debate, análisis y votaciones, las plenarias de Senado y Cámara de Representantes aprobaron el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2022 - 2026, el documento más importante del Gobierno Nacional que define las metas a cumplir en el corto, mediano y largo plazo, así como los instrumentos financieros y presupuestales necesarios para el cumplimiento de las propuestas del presidente Gustavo Petro.

Bajo esta premisa, EL NUEVO SIGLO preguntó a congresistas del Pacto Histórico, Alianza Verde, Partido Comunes y Coalición Centro Esperanza su percepción de los resultados del Plan Nacional de Desarrollo a favor de Bogotá y de lo que faltó por aprobar. Aunque, cabe resaltar que EL NUEVO SIGLO no obtuvo respuesta por parte de los integrantes de las demás bancadas.

Pacto Histórico

El congresista Gabriel Becerra señaló que Bogotá es el epicentro del cambio y resaltó la aprobación de diversas propuestas.

“Se aprobó la creación de la renta ciudadana enfocada a hogares en situación de pobreza, pobreza extrema y vulnerabilidad económica, tendremos el programa ‘Hambre Cero’ que será una política pública para la garantía progresiva del derecho humano a la alimentación y lucha contra el hambre. Para los jóvenes se creó el programa ‘Jóvenes para la Paz’ que será una transferencia monetaria condicionada a trabajo social y formación educativa. Igualmente, se aumentará los cupos para la Educación Superior e incorporamos un artículo que permitirá realizar una reforma participativa a la Ley 30”, explicó.

Por su parte, el congresista Heraclito Landinez sostuvo que el PND aprobado le otorga importantes herramientas y recursos a Bogotá para su planificación.

“Resaltamos la financiación por parte del Gobierno Nacional a los proyectos férreos de transporte público masivo. Esto significa que proyectos como la línea 2 del metro subterráneo y los proyectos de transporte regional serán prioridad. Por otra parte, la recuperación de uno de los hospitales más importantes en el país, el San Juan de Dios, que podrá ser utilizado por los bogotanos en servicios de alta complejidad”, señaló.

Finalmente, la congresista María del Mar Pizarro sostuvo que hay varios proyectos estratégicos priorizados dentro del Plan Plurianual de Inversiones para Bogotá. Entre ellos destacó los proyectos férreos como Regiotram de Occidente y del Norte, la Red férrea Bogotá - Boyacá y la Conexión férrea de Bogotá con el Corredor Férreo central.

“Además, bajo mi rol como coordinadora ponente, logramos adicionar dos proyectos estratégicos adicionales que son claves. El primero es la implementación de un Plan Piloto de Economía Nocturna en Bogotá para impulsar las actividades productivas que operan de noche en la ciudad. Esto puede impulsar un sector que ya de por sí genera $3 billones de pesos y 34.000 empleos al año. El segundo proyecto incluido fue la Restauración de la nave central de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús - el Voto Nacional, un pendiente de hace varias administraciones”, concluyó.

Alianza Verde

La congresista Olga Lucía Velásquez sostuvo que a Bogotá le fue muy bien en el Plan Nacional de Desarrollo por cuenta de artículos como el 161 que establece el fortalecimiento para agilizar las autorizaciones en los procesos de fabricación, importación de medicamentos y dispositivos y tecnologías en salud.

“Este artículo blinda todo ese proceso que se viene trabajando y lo que establece es esa posibilidad de hacer la fabricación de vacunas que podamos, además, a través del Ministerio de Salud y Protección Social, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Comercio Industria y Turismo, y junto a el Invima, desarrollar diferentes estrategias para apoyar el proceso de precalificación de la Organización Mundial de la Salud”, señaló.

Asimismo, agregó que hay otros temas complementarios que, aunque son importantes y favorecen a Bogotá, no fueron tan visibles durante la aprobación del Plan Nacional de Desarrollo.

“Todo lo que se quedó en el Sistema Nacional de Justicia Familiar, el fortalecimiento de las comisarías de familia, de las defensorías de familia, en la posibilidad de hacer un trabajo articulado y coordinado”, concluyó.

Partido Comunes

El congresista Carlos Carreño resaltó la cofinanciación por parte de la nación de los dos proyectos de cable: [a). Potosí: beneficio a la Localidad de Ciudad Bolívar y al Municipio de Soacha; b) Reencuentro: beneficio a las localidades de Candelaria, Santa Fe y Mártires], la apuesta de poder construir un ejercicio de energías limpias para el transporte público se materializa en incentivar económicamente las bajas emisiones en el transporte público.

“Por lo anterior, el Estado brindará sostenibilidad a través del apoyo a los sistemas de transporte público activos. El Tren de Cercanías de la Sábana integrará proyectos en el occidente y en el norte para facilitar la movilidad en Bogotá y sus alrededores. En términos de educación superior se apostará a reformar la ley de educación superior que lleva 30 años de desactualización y podrá avanzar en los debates históricos universitarios”, indicó.

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“Todo lo anterior recoge tres elementos principales: 1) El pensarse una ciudad sostenible y con producciones limpias; 2) La garantía de Derechos y la centralidad del joven como actor en la producción del espacio urbano; por último, 3) La garantía de proyectar la mejor forma de conectividad de la ciudad para los diferentes flujos poblacionales y de actividad sistémica que necesita la ciudad capital”, aseveró.

Coalición Centro Esperanza

La congresista Jenniffer Pedraza destacó que el PND abre la puerta para que el Gobierno Nacional no tenga la limitación de sólo poder financiar el 70 % de los proyectos de sistema de transporte público masivo estratégicos, sino que podrá financiar un porcentaje mayor.

“Se eliminó la palabra soterrar, que era una propuesta inicial del Gobierno, sin embargo, el hecho de que no esté esta palabra no cierra la posibilidad que el Gobierno insista en construir el metro subterráneo. El Plan de Desarrollo, lamentablemente, insiste en que los sistemas de transporte público se financian, principalmente a través de las tarifas, o sea a través del pasaje, esto no ocurre en ninguna parte del mundo porque la operación de los sistemas de transporte público es costosa y si la descargamos en las tarifas, pues no va a ser accesible para gran parte de la población”, aseveró.

En ese sentido, explicó que una de las derrotas en la aprobación del Plan Nacional de Desarrollo corresponde a la inclusión de una política de protección a moradores, siempre que se apruebe un uso de suelo de renovación urbana, que es el uso del suelo más agresivo, según explicó.

“Digamos que autoriza al Estado para expropiar, toda vez que se entiende que la renovación urbana es un interés general y colectivo de la ciudad. Sin embargo, aún con la renovación y con la expropiación es muy importante que haya una negociación y que haya unos acuerdos justos para las personas que habitan en los predios que van a ser sujeto de renovación urbana. Por otro lado, también propusimos derogar la figura de la expiación en favor de terceros, que es básicamente, por ejemplo una constructora decide que tiene un proyecto para construir vivienda de alto valor, llama al Distrito, llama a los entes territoriales para que sencillamente expropian a la gente que habita allí sin que esté garantizado que esto es en función del interés general y sin que haya de nuevo una política de protección a moradores. Lamentablemente, ninguna de estas dos iniciativas nuestras fue tenida en cuenta”, concluyó.