El Ministerio de Transporte celebra la inauguración y entrega del nuevo puente El Alambrado, que marca un importante hito en la recuperación de una conexión esencial entre los departamentos de Quindío y Valle del Cauca. Este logro sigue a seis meses de intenso esfuerzo y restauración de un enlace que se vio interrumpido en abril.
Se espera que la viceministra de Transporte, María Constanza García, arribe al lugar para presidir la inauguración, seguida de la apertura al tráfico vehicular. Este acontecimiento marca el fin de seis meses de esfuerzo dedicado a la restauración de esta vía crucial.
El colapso del puente original el 12 de abril conmocionó a la región, generando una respuesta inmediata del Ministerio de Transporte, la Agencia Nacional de Infraestructura y el concesionario Autopistas del Café. La solución propuesta en ese momento fue la instalación de un nuevo puente de estructura metálica.
La ministra de Transporte (e), María Constanza García, compartió la importancia de este logro: "La puesta en funcionamiento del puente El Alambrado es una gran noticia para la región y representa enormes beneficios. Es una obra clave para restablecer la movilidad del transporte de carga y de pasajeros hacia el centro del país".
El nuevo puente, con un peso de 580 toneladas, una longitud de 102 metros y una altura de 17 metros, fue trasladado y ensamblado sobre el río La Vieja, un proceso que presentó desafíos considerables debido a la ubicación del puente colapsado en el lecho del río. El desmonte del puente antiguo se llevó a cabo en dos meses, mientras que la construcción del nuevo Puente El Alambrado se completó en un tiempo récord de cuatro meses.
La apertura de esta nueva infraestructura es aún más destacable, ya que normalmente, un puente de estas dimensiones requeriría aproximadamente dos años para ser construido. El Gobierno de Colombia, a través del Ministerio de Transporte, logró el restablecimiento de la movilidad entre Quindío y Valle del Cauca. Además, la economía local se verá revitalizada gracias a la movilización de productos fundamentales, como maíz, trigo, arroz y combustibles, que dependen de esta vía de transporte.
La inauguración del puente representa un hito en la ingeniería y una inyección de esperanza para la región, que estuvo ansiosa por recuperar su conexión vital entre Quindío y Valle del Cauca. El esfuerzo y la determinación del Gobierno en completar esta obra en tiempo récord subrayan su compromiso con la prosperidad de la nación y la movilidad de sus ciudadanos. El puente El Alambrado se alza como un símbolo de resiliencia y avance en un momento en que la infraestructura juega un papel esencial en la recuperación económica y el bienestar de la comunidad.
