La tasa de trabajo infantil ampliado registró una reducción del 5,7% al pasar del 11% en 2014 al 5,3% en 2017, según el último informe del DANE. Así lo destacó el alcalde Enrique Peñalosa al señalar que “en dos años y medio redujimos la tasa de trabajo infantil a menos de la mitad. Esto se ha logrado con un trabajo muy intenso que se ha hecho en diversas entidades, yendo con una serie de equipos a los sitios donde hay mayor riesgo de presentarse trabajo infantil".
Con este logro, se superó anticipadamente la meta trazada en el Plan de Desarrollo ‘Bogotá Mejor para Todos’ de reducir cuatro puntos porcentuales la tasa de trabajo infantil. El mandatario informó que, según cifras del DANE, la ciudad tiene 87.000 niños y niñas menos realizando algún trabajo u oficio en el hogar.
Cabe destacar que para 2017 la tasa de trabajo infantil ampliada a nivel nacional se ubicó en un 11,4 %, mientras que en Bogotá quedó en un 5,3 %.
Este resultado positivo se debe a la apuesta del alcalde Peñalosa, quien pidió reforzar las acciones en prevención y atención para que niñas y niños de la ciudad gocen de sus derechos y no sean expuestos al trabajo infantil.
"Nuestros equipos realizan un trabajo en calle para atraer a los niños a estos centros, en donde profesionales les brindan atención integral, los cuidan, los quieren y consienten", explicó la secretaria Social, Cristina Vélez.
Esto se logró gracias a la 'Estrategia Móvil de Prevención y Atención del Trabajo Infantil’, que identifica focos de trabajo infantil al transitar por diversos territorios de Bogotá, para lo cual el Distrito tiene programado invertir para el cuatrienio más de $29.400 millones.
"Estamos construyendo una ciudad amorosa y protectora para nuestros niños. Hemos hecho un trabajo sistemático y coordinado. El año pasado, por primera vez, no hubo niños que hubieran muerto por desnutrición. Los niños son nuestra prioridad, por eso estamos construyendo 30 colegios, jardines sociales, haciendo una inversión enorme en canchas de pasto sintético y parques", resaltó Peñalosa.
Un importante papel jugó la Secretaría Social en este trabajo, al pasar de 25 a 125 profesionales que identifican a niñas, niños y adolescentes en las calles de la ciudad para evitar que sean víctimas de esta problemática.
"En estos centros los niños desde los tres meses hasta los 17 años, aprenden, se divierten, reciben asesorías de tareas... Aquí hacen lo que en verdad deben hacer en su tiempo libre cuando no están estudiando", señaló Vélez.
El trabajo infantil ampliado incluye actividades desarrolladas por niños, niñas y adolescentes en calles y barrios, en ventas ambulantes, ‘bicitaxismo’, trabajo en plazas de mercado y reciclaje, entre otros; y además la realización de oficios en el hogar, cuidado a personas mayores, con discapacidad o de sus hermanos.
En el cumplimiento de la meta participaron activamente las secretarías de Educación, Salud, Seguridad, Convivencia y Justicia, Gobierno, Hábitat y Social, los institutos para la Economía Social (IPES), Protección de la Niñez (Idiprón), Bienestar Familiar (ICBF) y la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp).
La Secretaría Social atiende a niñas, niños y adolescentes en los trece Centros Amar. Los cuales operan en doce localidades en jornada diurna y nocturna, con una capacidad total de atención de 1.170 cupos.
Los niños que son atendidos en estos puntos son identificados por las 25 unidades de la Estrategia Móvil.
En estos centros se brinda a niños, niñas y adolescentes acompañamiento pedagógico, nutricional, psicosocial y artístico, para el desarrollo de sus capacidades y potencialidades mientras sus padres trabajan.
A su vez, se brinda acompañamiento psicosocial y gestión a las familias, para que cuenten con oportunidades laborales y productivas que permitan mejorar sus condiciones económicas, lo que contribuye a la desvinculación de las niñas, los niños y adolescentes del trabajo infantil.