La comunidad de Sogamoso se unió hoy, viernes 10 de enero, en un plantón pacífico frente a la Fiscalía del municipio exigiendo respuestas sobre la desaparición de Sara Michel Vargas Vega, una niña de 11 años que desde el 25 de diciembre de 2024 no regresa a casa. Este evento fue convocado por los familiares de la menor de edad, quienes claman por celeridad en las investigaciones tras 17 días sin noticias sobre la niña.
Sara fue vista por última vez en la vereda Vanegas, durante una reunión familiar que se tornó caótica. Según los testimonios, la niña desapareció entre las 12:30 y 1:00 a.m., vestía una chaqueta morada, una camisa blanca y un pantalón negro. Desde el momento en que se reportó su desaparición, la Fiscalía activó protocolos de búsqueda y registró el caso en el Formato Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas. A partir del 29 de diciembre, se inició una investigación penal formal por el delito de desaparición forzada, lo que permite a las autoridades ampliar sus recursos y herramientas para la búsqueda.
Según la entidad, se han intensificado las labores de búsqueda, trabajando en conjunto con el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), la Policía Judicial y otras entidades como la Cruz Roja y el Ejército Nacional. Sin embargo, hasta ahora no se han obtenido resultados significativos ni pistas concretas sobre el paradero de Sara.
En respuesta a la creciente preocupación de la familia y la comunidad, se ofreció una recompensa de hasta 10 millones de pesos por información que conduzca a su localización.
La madre de Sara, Leidy Tatiana Vega, expresó su desesperación y ha hecho un llamado a las autoridades para que intensifiquen sus esfuerzos. "Queremos resultados, por favor, con la búsqueda de mi hija. Ayúdennos", declaró.
El plantón pacífico convocado por los familiares de Sara Michel Vargas Vega y la comunidad de Sogamoso es una manifestación de descontento ante la presunta falta de efectividad de la Fiscalía en la obtención de información sobre la desaparición de la menor. A pesar del tiempo transcurrido desde el hecho, los allegados a la niña sienten que las investigaciones no han avanzado lo suficiente y que las autoridades no han brindado respuestas claras ni acciones contundentes.