El organismo tomó todos los bienes, haberes y negocios de la EPS y además designó un nuevo gerente 

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Todos los bienes, haberes y negocios de la EPS Cruz Blanca fueron tomados e intervenidos por la Superintendencia de Salud.

Además el órgano de control designó a Felipe Negret Mosquera como gerente removiendo de su cargo a Ana Leonor Arroyave.

Cabe recordar que la EPS ya tenía medida de vigilancia especial desde el 2012 y la Supersalud busca que se pueda garantizar las condiciones para desarrollar su objeto social, dado el creciente número de quejas, el desequilibrio financiero, sus condiciones de solvencia y su pérdida progresiva de afiliados. 

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Cruz Blanca opera en cuatro regiones y tiene más de 336 mil afiliados.

Se calcula que en los próximos dos meses el agente especial deberá determinar la viabilidad o no de la empresa. En caso de detectar alguna irregularidad o inconsistencia en la información contable relacionada con la gestión de la exrepresentante legal, deberá iniciar las acciones legales respectivas ante las autoridades competentes.

¿Cuáles son los hallazgos?

La Superintendencia encontró que la EPS tiene "serios"  problemas en el modelo de atención en salud y en en el suministro de medicamentos.

Según el organismo de control, Cruz Blanca "no cumple con la cobertura para los servicios de baja complejidad de laboratorio clínico y de alta complejidad como oncología pediátrica".

Asimismo, tiene inconvenientes con el dominio de Experiencia en la Atención como tiempo promedio de espera para la asignación de citas médicas, tiempo promedio de espera para la asignación de cita de odontología general y tiempo promedio de espera para la asignación de cita de pediatría, entre otros problemas.

Durante el segundo trimestre de 2019 se notificaron en contra de Cruz Blanca EPS 182 incidentes de desacato, presentándose el mayor número en el mes de junio, con 71 casos.