El futuro de las exportaciones e importaciones a mediano y largo plazo es centro de atención por estos días, especialmente, la seguridad jurídica y las garantías logísticas.
Sobre los retos logísticos en Buenaventura, Juan Manuel Sanclemente, director Ejecutivo del Comité Intergremial y Empresarial del Valle, señaló su preocupación por “el tema de seguridad jurídica, ya que termina siendo una garantía que necesitan tener medianamente claro los actores del tejido empresarial colombiano, para decidir canalizar inversiones nuevas en el país".
Por su parte, Javier Díaz Molina, presidente ejecutivo de Analdex, señaló que "la seguridad jurídica es primordial, ya que los privados hacen grandes inversiones, y en esa medida, esperan el retorno de ese aporte durante los años. Con la falta de seguridad jurídica, los empresarios se abstienen de hacer estas inyecciones económicas que tienen grandes beneficios para el país. Es necesario trabajar en fortalecer los lazos de confianza entre el sector público y privado”.
Además, hay preocupación alrededor del desarrollo de la zona portuaria de Buenaventura, dado que el proceso alrededor de la profundización del canal de acceso a las terminales portuarias ha sido lento.
El canal de acceso a esta zona portuaria es el único en el litoral pacifico que se encuentra por debajo de los 16 metros, otros puertos ganan competitividad por la mayor profundidad para el fondeo de las motonaves, permitiendo de esta manera el ingreso a sus puertos de motonaves post panamax y así generar servicios de valor agregado para la atención a la carga, trasbordos, etc.
En el caso del Puerto de Barranquilla se ha logrado mantener un calado de 10,2 metros, con un crecimiento del 11,6% en la movilización de carga durante el primer semestre de 2024, frente al mismo período de 2023.
Al respecto, Lucas Ariza, director Ejecutivo de Asoportuaria, manifestó que la inestabilidad y la variabilidad en el calado operativo han minado la confianza de los usuarios portuarios. “Es crucial implementar soluciones a largo plazo, como obras hidráulicas, para asegurar una estabilidad en el río y reducir la dependencia del dragado”, señaló Ariza.
Según la entidad, entre enero y junio de 2024, se ha movilizado por el río una carga neta de 6,7 millones de toneladas.
Otro tema que se adelanta a nivel logístico en el país son las vías de cuarta generación (4G) que conectarán al Pacífico colombiano con los diferentes puertos del territorio nacional. En ese sentido, Antioquia es clave en el desarrollo de estas vías 4G, ya que por allí pasan nueve tramos concesionados, donde se adelantan 1.370 kilómetros de dobles calzadas,
141 túneles, 1.300 viaductos y la modernización de 7.000 kilómetros de vías. Con este proyecto se estima una disminución de 30% en los tiempos de desplazamiento entre los centros productivos y los puertos, y en un 20% de los costos logísticos en el transporte de mercancías.
Luis Horacio Gallón, secretario de Infraestructura de Antioquia, señaló que “lamentablemente Invias apenas empezó la construcción del túnel del Toyo en el 2019, generando un retraso en su entrega de aproximadamente dos años. Puerto Antioquia empieza a funcionar en el primer trimestre del 2025 y nosotros estimamos terminar el túnel al final del 2026".
Gallón agregó que "cuando el túnel de Toyo esté funcionando, la movilización de la carga pesada disminuirá cerca de una hora. Lamentablemente nos va a tocar pasar dos años sin utilizar el túnel que debería estar terminando a la par de Puerto Antioquia, pero ya no se dio y ahora es clave mantener la vía en buenas condiciones para que los vehículos de carga pesada no tengan tanta dificultad".