JUSTICIA
Ángeles y corruptos
BIEN lo dijo el papa Francisco que “la corrupción es la gangrena de un pueblo”. Se refiere a este fenómeno como el más peligroso para el desarrollo de los pueblos. La corrupción es la vía contraria del Evangelio. Jesús vino a este mundo a redimir los pecados del hombre, no para que la gente rezara, comulgara y luego robara.
Ángeles y corruptos
BIEN lo dijo el papa Francisco que “la corrupción es la gangrena de un pueblo”. Se refiere a este fenómeno como el más peligroso para el desarrollo de los pueblos. La corrupción es la vía contraria del Evangelio. Jesús vino a este mundo a redimir los pecados del hombre, no para que la gente rezara, comulgara y luego robara.