Editorial | El Nuevo Siglo
En  un país en donde todos los días se anuncian investigaciones exhaustivas y es común escuchar la desgastada frase “se llegará hasta las últimas consecuencias”, es entendible que la opinión pública muestre cierto escepticismo cuando se habla de pesquisas de fondo sobre asuntos de alto interés e impacto públicos.

La  concepción de un mundo en paz, donde se proscriban las confrontaciones es una aspiración loable, que diversas organizaciones internacionales se han empeñado en difundir. No obstante pareciera que tan noble propósito es una quimera difícil si no imposible de alcanzar.

*La encrucijada de Putin

*Hoy se vota por unidad o segregación

 

 

La  próxima semana se cumplen dos años de la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia y Estados Unidos. Como es apenas obvio, las ópticas sobre los efectos positivos y negativos del pacto con la potencia del Norte son contradictorias, según la orilla en que esté ubicado quien hace la respectiva evaluación.

Tras  el impacto público que produjeron los últimos casos de ataque con sustancias químicas, las autoridades se comprometieron a generar no sólo un nuevo marco normativo para reaccionar ante esa clase de agresiones, sino que anunciaron que se implementarían medidas para controlar la venta indiscriminada de este tipo de productos.

Ya es un hecho que a mediados del año Colombia se verá afectada por los efectos del fenómeno climático de El Niño. Tanto los pronósticos de la Organización Meteorológica Mundial como de las agencias locales en el centro y sur del continente americano confirmaron que a partir de junio la zona se verá impactada por una temporada seca muy marcada que podría llegar en varias regiones a niveles críticos.