Coalición de centroderecha: llegó la hora de las definiciones | El Nuevo Siglo
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Domingo, 16 de Enero de 2022
Redacción Política

A un poco más de tres semanas de oficializar los integrantes de cada coalición para las consultas presidenciales interpartidistas del 13 de marzo, en el bloque de Equipo por Colombia se produjeron varios movimientos cruciales.

El punto central continúa siendo si Óscar Iván Zuluaga, candidato del Centro Democrático, entrará en esta coalición de la centroderecha o si, por el contrario, llegará a la primera vuelta sin ninguna alianza a la vista.

En medio de esa discusión se produjo esta semana la renuncia a la precandidatura presidencial de uno de los artífices de la coalición. En efecto, no dejó de ser sorpresivo el marginamiento del exministro de Hacienda conservador Juan Carlos Echeverry, puesto que había sido uno de los animadores centrales para lograr una alianza entre líderes regionales preeminentes, con énfasis en los resultados positivos cuando ocuparon los cargos de alcaldes o gobernadores.

Echeverry también fue el primer candidato en proponer el aumento histórico del salario mínimo en un 10%, lo cual luego fue adoptado por el gobierno Duque en la mesa de concertación con empresarios y trabajadores.

En todo caso, el exministro adujo que se retiraba por cuanto le quedaba muy poco tiempo para lograr el reconocimiento en las encuestas, pero que se sentía satisfecho con la labor adelantada. En este sentido, agradeció a los más de 900 mil firmantes que avalaron su precandidatura. Pese a su retiro, así como al anuncio de que regresará a una cadena radial para ejercer el periodismo, es claro que Echeverry ha dejado una buena estela para futuras posibilidades políticas.

De tal manera, los precandidatos del Equipo por Colombia continúan siendo el exalcalde Barranquilla, Álex Char; el exalcalde de Medellín, Federico Gutiérrez; el exalcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa; la exgobernadora del Valle y directora única del partido de La U, Dilian Francisca Toro; y el senador David Barguil, candidato único del partido Conservador.

Al mismo tiempo que Echeverry daba un paso al costado se sumó un nuevo partido a la coalición de centroderecha, en cabeza de la candidata presidencial Aydeé Lizarazo, del partido MIRA, colectividad de origen cristiano que hoy tiene tres senadores.

Dilema de fondo

De forma paralela se evidenció una división de criterios en la coalición en torno a aceptar o no el ingreso de Zuluaga, luego de la invitación hecha por Barguil. Sobre esa posibilidad estuvo de acuerdo Gutiérrez, pero Char, Toro y Peñalosa dejaron entrever su negativa.

En efecto, en una entrevista a María Isabel Rueda en El Tiempo, Char se mostró en contra del ingreso del uribismo, en tanto Toro insistió en que el propósito de la coalición no es polarizar sino reunirse en torno a unas propuestas por fuera del ambiente divisivo que se vive en la campaña. Por su parte, Peñalosa había sostenido previamente que no le parecía este el momento indicado para una coalición con el Centro Democrático.

No deja de ser curioso que este tipo de decisiones, que suelen tramitarse en conjunto, empiecen a ser ventiladas de manera individual, aunque es evidente el clima de cordialidad que impera entre los miembros de la coalición.

Queda, pues, claro que no hay consenso sobre el ingreso de Zuluaga, pero se anunciaron unas reuniones sobre la materia en próximos días.

Por su parte, Zuluaga ha sostenido reiterativamente que es partidario de la unidad de todas las fuerzas de esta corriente política, pero del mismo modo se mostró muy confiado en el soporte de su partido y sus posibilidades de jugar un papel preponderante hacia la primera vuelta.



Potenciales en juego

El Equipo por Colombia, en términos actuales y sin sumar al Centro Democrático, cuenta con alrededor de treinta senadores. En caso de entrar Zuluaga, esta coalición debería llegar a los cincuenta. No se descarta, igualmente, que otro partido de origen religioso, como Colombia Justa y Libres, ingrese también a este bloque, añadiendo tres senadores.

De otra parte, todavía es incierta la ruta que tomarán los partidos Cambio Radical y Liberal, que sumados cuentan con 30 senadores. No se sabe si entrarían a hacer parte de esta coalición o si, por el contrario, harán una consulta entre precandidatos de este origen. Lo que sí se sabe es que la otra coalición, la de Centro Esperanza, no acepta unirse con el partido Liberal, aunque sí admitió al exministro y precandidato Alejandro Gaviria, de origen en las toldas rojas, pero sin parlamentarios que lo acompañen.

Del mismo modo, es sabido que Char hace parte de Cambio Radical pero su precandidatura está avalada en firmas y por el momento no ha comprometido a ese partido. De hecho, es posible que solamente se tomen determinaciones en materia de aspiraciones presidenciales, tanto en el liberalismo como en Cambio Radical, hasta después de las elecciones parlamentarias y las consultas interpartidistas.

Por el momento, Equipo por Colombia podría contar con un potencial caudal de cinco millones y medio de votos, acorde con los últimos registros electorales partidistas. El punto consistiría, sin embargo, en si esa votación va a traducirse efectivamente en la primera vuelta del 29 de mayo hacia quien logre la candidatura única después de la consulta del 13 de marzo.

Visto todo lo anterior, es claro que a pocas semanas de vencerse el plazo para que las coaliciones oficialicen su respectiva inscripción y señalen cuáles son los precandidatos que participarán en las consultas, las definiciones no se pueden seguir aplazando. Una decisión urgente para tomar sobre todo en la centroderecha, ya que las demás coaliciones están estructuradas. Es decir, del Pacto Histórico, con prevalencia clara de Gustavo Petro, y la de Centro Esperanza, en donde despunta Sergio Fajardo.

Por ahora parece definido que el exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, irá directo a la primera vuelta, tras reiterar que no buscará alianzas con ningún sector. En tanto que otro precandidato por firmas, como el exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquia, Luis Pérez, no se sabe qué camino tomará, pese a su origen liberal.

Como se ve, el 2022 arrancó con fuerza en el ajedrez de la campaña presidencial y antes de que termine este mes se darán movidas muy importantes de cara al primer pulso en las urnas en la contienda por la Casa de Nariño.