UNA NUEVA marcha contra el presidente Gustavo Petro fue convocada por la oposición para el 20 de julio, Día de la Independencia.

Como se sabe, ese mismo día se instala en el Congreso de la República una nueva legislatura, momento en que el jefe de Estado debe dirigirse al país en un discurso.

Esta citación aún no ha sido replicada por otros sectores adversos a las políticas del Gobierno, pero tampoco ha habido un pronunciamiento por parte del Ejecutivo al respecto.

El llamado a tomar las calles se da a conocer días después de que una reciente encuesta de Opinómetro revelara que la desaprobación del jefe de Estado aumentó a 65 %.

De acuerdo con el sondeo, las zonas donde más se registra el descontento de los colombianos con la gestión de Petro son Bogotá y la región Central con el (68 %), seguida del Caribe (64 %), Oriental (61 %) y la Pacífica (56 %).

Pero esta no es la primera vez que la oposición llama a los ciudadanos a manifestarse en las calles en contra del Gobierno y sus reformas.

El domingo 21 de abril, miles de personas protestaron en las principales ciudades del país contra el gobierno de Petro en momentos en que su popularidad está en rojo tras veinte meses de gestión.

En esa oportunidad, en Cali, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga y otras capitales, los manifestantes se sumaron con banderas de Colombia, camisetas blancas y un grito al unísono: "¡Fuera Petro!".

Anteriormente, específicamente el 6 de marzo, la oposición también marchó en contra de las políticas implementadas por el petrismo. Ese día, más de 50 mil personas se congregaron en distintas ciudades del país, con la mayor concentración en Bogotá, específicamente en la plaza de Bolívar.

Uno de los motivos de esta manifestación es la inconformidad con la reforma de la salud, y precisamente los promotores hicieron que coincidiera en esa fecha, horas antes de que se votara en tercer debate en la Comisión Séptima del Senado de la República, que terminó hundiéndola.

Como es sabido, la popularidad del mandatario ha disminuido en medio de escándalos de corrupción vinculados a funcionarios de Gobierno y hasta de su propia familia. También, ante un llamado a invocar a una asamblea constituyente, amparado por el Acuerdo de Paz con las extintas Farc, sin pasar por el Congreso de la República.

Sectores de oposición insisten en que la intención del jefe de Estado con dicho proyecto es reelegirse en 2026 y atornillarse en el poder, lo que han rechazado con contundencia.