LA CONFERENCIA de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2024, COP29, se realiza en Bakú, Azerbaiyán desde ayer 11 hasta el próximo 22 de noviembre.
Allí, en representación de Colombia asistirá la ministra de Ambiente y presidenta de la COP16, Susana Muhamad, junto a una delegación nacional. Sobre los objetivos de su participación en el magno evento, dijo que “la COP16 tomó una decisión por consenso sobre la necesidad de las sinergias entre biodiversidad y cambio climático. Esta decisión la llevaremos precisamente a la COP29 de Clima para reivindicar la importancia de incluir en las NDC, que vienen el próximo año, el cuidado de la biodiversidad y las metas del Marco Kunming Montreal”.
Además, señaló que “en un contexto de urgencia global, Colombia también reafirma su compromiso para que los países con mayor diversidad biológica cuenten con las herramientas necesarias para enfrentar la crisis climática sin comprometer sus ecosistemas”.
De igual manera, la jefa de la cartera ambiental se refirió al hecho de que no se hayan podido reducir las emisiones de carbono y demás: “Si el G20 (integrado por los países que representan el 85% de la economía mundial) no baja sustancialmente sus emisiones y si no hay un acuerdo de transformación económica de fondo, lo que venimos haciendo para proteger la biodiversidad será insuficiente. Lo cierto es que en este momento no estamos avanzando de manera suficiente hacia las metas climáticas”.
La descarbonización es el tema clave a defender, por parte de Colombia, pero, en especial, la ministra ha hecho énfasis en el análisis que se realiza de este objetivo.
“No estamos contabilizando lo que contribuye una tonelada de CO2 a cada punto del PIB, y tampoco como algunos países están exportando sus emisiones hacia otras regiones sin que estas se desliguen de su economía”, sostuvo.
De igual manera, Muhamad expresó que es consciente de que una buena propuesta es realizar un canje en esta materia, entre la deuda y la acción climática. “Tenemos que cambiar las reglas de juego, pues no hay ni fondo de pérdidas y daños, no hay plata para la adaptación, y la situación fiscal de los países más afectados es cada vez más insostenible”, afirmó.
Mientras que el canciller Luis Gilberto Murillo, es “optimista, pero en este caso no veo que vayamos a poder avanzar por la misma transición que se está dando a nivel global. Creo que esta es una COP que va a permitir avanzar, pero donde las decisiones de fondo tendrían que tomarse en la que viene. Y de fondo quiere decir realmente en varios frentes, incluyendo cómo realmente se incentiva a los países de altas ambiciones climáticas”.