EL MANDATO del presidente Gustavo Petro ha sido cuestionado por múltiples razones durante estos años, quizás una de las principales corresponde a las designaciones de los denominados gestores de paz, la figura contemplada en la Ley 0418 de 1997 que permite la suspensión de órdenes de captura en contra de miembros de grupos armados que adelanten tareas propias de procesos de paz, que estén acreditados por el alto Comisionado para la Paz y que hayan dejado las armas.

Valiéndose de este concepto, pero haciendo un ajuste en su nombre, el presidente Petro ha designado a varias personas como gestores de paz, pese a los constantes cuestionamientos. Algunos de ellos han sido integrantes de la denominada Primera Línea y el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso.

Es bajo esta premisa que el representante a la Cámara Hernán Cadavid, radicó una solicitud para citar a debate de control político al consejero comisionado de Paz de Colombia, Otty Patiño, y al ministro de Defensa Nacional, Iván Velásquez. Además, también estará invitada la fiscal General de la Nación, Luz Adriana Camargo.

“Ante la actitud de encubrimiento del Gobierno con los llamados gestores de paz que están regados por el país delinquiendo, citamos a responder a los responsables de semejante descalabro”, publicó Cadavid en su perfil de X.

Entre el cuestionario que deberán responder se encuentra que deberán dar explicaciones sobre quienes tienen actualmente la calidad de gestores de paz, facilitadores y voceros de paz y cuántas personas se encuentran designadas bajo estas figuras, además de a cuáles grupos armados pertenecen las personas que han sido designadas.

En diálogo con EL NUEVO SIGLO, el parlamentario aseveró que la figura de gestores de paz, voceros o delegados incorporada en la Ley de Orden Público, no ha venido siendo usada, sino abusada por parte del Gobierno nacional.

“Hoy cuanto delincuente se atraviesa termina siendo nombrado gestor de paz, no hay control sobre sus actividades, no hay control sobre sus desempeños, nadie sabe en qué zona del país se encuentran y, por lo general, han sido detallados o encontrados en flagrancia delinquiendo mientras tienen calidad de gestores de paz”, advirtió.

¿Qué está pasando?

Según sostuvo Cadavid, esas designaciones no han cumplido el propósito para el cual fueron concebidas en la ley.

“La figura de gestor de paz ha sido utilizada históricamente en Colombia de manera excepcional para que algunas personas cumplan unas tareas específicas en acercamientos de negociaciones entre los gobiernos y los grupos armados ilegales. Aquí hay delincuentes comunes, miembros de bandas delincuenciales, disidencias de la Farc y cuantas más personas entre el Eln y otros, nombrados gestores de paz, sin control alguno”, reiteró.

En este sentido, señaló que una de las medidas que debería incorporar el Gobierno nacional para darle transparencia y confianza a la figura de gestores de paz, es que sea de manera excepcional y no para resolver los problemas penales a los delincuentes que están siendo beneficiados.

“Además, el país debería conocer después de un informe publicado por el Gobierno, cuáles son las gestiones a las que se han comprometido, si las están cumpliendo, si no las están cumpliendo y el carácter penal en el cual se vean inmiscuidos las personas que sean beneficiarias, no se le puede estar otorgando gestoría de paz sin que importe el prontuario delincuencial en el cual están inmersos”, agregó.

Por último, indicó que lo que espera después del debate de control político, es que los miembros de los grupos armados al margen de la ley, no fueran beneficiados de manera directa, sin filtro, como advierte que lo está haciendo el Gobierno nacional.

“Que el Gobierno reflexione sobre la utilización de esa figura como otras, en complemento con el cese al fuego, que no han servido para absolutamente nada”, concluyó.

Aún no existe una fecha estipulada para llevar a cabo este debate de control político en el Congreso de la República.