En elfuncionamiento propuesto para el ‘congresito’, los legisladores serían unos convidados de piedra, manifestó el senador Eduardo Enríquez, del Partido Conservador.
EL NUEVO SIGLO: Hay muchas críticas a la reforma constitucional del ‘congresito’…
EDUARDO ENRÍQUEZ:Considero que el proyecto tiene las mejores buenas intenciones.
Lo difícil es que se desconoce la competencia que tiene el Congreso para legislar y a cambio se quiere constituir por mandato constitucional una comisión especial legislativa. Los conocedores de la materia manifiestan o hacen la advertencia de que allí puede haber sustitución constitucional. Y de otra parte, de ser aprobado en el Congreso, ese acto legislativo tendría que resistir el examen de razonabilidad de la Corte Constitucional, que lo veo difícil.
ENS: ¿Es verdad que le quita poder deliberatorio al Congreso?
EE:La respuesta es sencilla. El Congreso cumpliría una simple función notarial, por dos consideraciones. La primera, porque el Ejecutivo de reserva la facultad total de la iniciativa. Y en segundo lugar, el Congreso queda con una función muy subalterna de aprobar o improbar. Es más, si se quiere hacer alguna modificación, la única forma para lograrlo es conseguir el aval del Gobierno. La verdad hasta donde llegan mis modestos conocimientos, esto no tiene antecedentes.
ENS: ¿El presidente prácticamente remplazaría al Congreso por seis meses?
EE:Las facultades del Ejecutivo son omnímodas porque abarca iniciativas y prácticamente el trámite de reforma constitucional y de leyes.
Reitero: el Congreso prácticamente sería un convidado de piedra. Y al decir de otros conocedores de la materia, esa sería una especie de constituyente indirecta y de un Congreso que realmente en esas condiciones poco o nada tiene que hacer.
ENS: ¿En ese contexto, qué ambiente tendría la aprobación de la reforma?
EE:El Congreso creo que hará uso de su soberanía legislativa. El debate se inicia al interior del corazón de la democracia, que es el Congreso de la República. Y por supuesto, se darán una serie de opiniones, todas tendientes a acertar, porque el momento es difícil en Colombia y por lo tanto hay que fortalecer las instituciones republicanas de Colombia con el propósito de conseguir la paz tan anhelada de tanto tiempo, y que con urgencia demanda el pueblo de Colombia.
ENS: ¿Usted será uno de los ponentes de la iniciativa?
EE:La presidente de la Comisión Primera ha designado a 10 ponentes, de 19 que conformamos la Comisión Primera constitucional. De manera que hay que estudiar, escuchar y ojalá acertar.
Colombia necesita más que nunca del concurso de todos y sobre todo la armonía reinante de las tres ramas del poder público.
ENS: Hoy se desarrolla el debate de la justicia transicional. ¿Qué expresará en esta citación?
EE:Este es un debate citado por las honorables senadoras Claudia López y Viviane Morales, y por mí, con la finalidad de escuchar las determinaciones del Gobierno, del jefe negociador en La Habana, Humberto de la Calle. También se ha invitado al fiscal Eduardo Montealegre y al procurador Alejandro Ordoñez, que ya nos anunció que sí asiste. Y vamos a escuchar también las ponencias autorizadas en la materia.
Este un tema muy importante en los acuerdos que se van a realizar y esperamos actuar a la altura de las circunstancias que el momento además amerita.
ENS: ¿Esa justicia también debe ser aplicable a los integrantes de la Fuerza Pública?
EE:No se puede legislar para un determinado grupo. Se debe legislar para todas las personas que han tenido que padecer los daños que ocasionan la violencia: se legislará para los alzados en armas, se legislará para todas aquellas personas que como miembros de las Fuerzas Armadas tuvieron que ver con este tema, de la Policía y de los civiles. Será un marco de justicia transicional propio para resolver los problemas que padece Colombia.