El secuestro del sargento del Ejército Libey Danilo Bravo, este fin de semana, puso un nuevo ingrediente de tensión en la negociación que adelanta el Gobierno con el Eln, que en México cumple en este momento su segundo ciclo. Ayer el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, dijo que exigieron en la mesa de conversaciones que el uniformado sea puesto en libertad.
El pronunciamiento del comisionado Rueda se produjo horas después de que el presidente Petro advirtiera que “estos son hechos que sabotean cualquier posibilidad de paz. Estos hechos de violencia contra la Fuerza Pública y los que día a día padecen las comunidades no pueden tener cabida en nuestra sociedad”.
“Se ha exigido al Eln en la mesa que está sesionando en México la libertad del militar que se encuentra en su poder. Ya se pidió la liberación, el propio presidente de la República lo hizo; cuando recibimos la información estando en México, de manera inmediata le solicitamos al Eln su libertad”, expresó ayer Rueda, luego de intervenir ante la Comisión de Paz del Congreso, en donde hizo un balance de los acercamientos con los grupos armados en el contexto de la política de paz del Gobierno.
El funcionario consideró que a pesar de este secuestro y otras acciones que ha cometido el Eln en medio de las negociaciones que adelanta con el Gobierno desde noviembre pasado, “hay voluntad de parte del Ejército de Liberación Nacional. Estamos hablando de un diálogo en medio de una conflictividad armada que no tiene cese de fuego”.
Uno de los puntos centrales del segundo ciclo de la negociación que se adelanta en Ciudad de México es la discusión sobre la posibilidad de que el Gobierno y este grupo subversivo pacten un cese bilateral el fuego.
El pasado domingo, Rueda dijo que “la mesa será fortalecida con la profundización de asuntos de interés para Colombia: los asuntos de la participación y los asuntos de cese el fuego y desescalamiento del conflicto”.
De antemano el cese del fuego bilateral con el Eln produjo un chasco al Gobierno, después de que el pasado 31 de diciembre el presidente Petro anunciara que lo habían pactado con esta guerrilla y con cuatro grupos armados ilegales más.
Sin embargo, horas después el Eln desmintió al presidente, al señalar que no pactó esta medida y exigió al Gobierno no hacer anuncios que no se negocien en la mesa.
Esta situación produjo una minicrisis en la negociación, que obligó al Gobierno a solicitar al Eln una reunión extraordinaria en Caracas, hace algunas semanas, en donde las partes convinieron no hacer anuncios fuera de la mesa, así como iniciar la discusión de un cese del fuego bilateral en el segundo ciclo en México.
Por su parte, monseñor Héctor Fabio Henao, quien hace parte de la mesa a nombre de la Iglesia, manifestó su preocupación por el secuestro del uniformado del Ejército, así como por otras acciones violentas que sigue ejecutando el Eln en medio de la negociación de paz.
“Este será un tema de la mesa de negociación que se desarrolla en México con el Eln, y nos llama la atención sobre la urgencia de avanzar hacia un cese al fuego que permita garantizar todas las condiciones”, expresó monseñor Henao.
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‘Segunda Marquetalia’
El comisionado para la Paz dijo también, frente a los acercamientos con la ‘Segunda Marquetalia’, que según los análisis jurídicos que se han hecho no tendría estatus político y, por lo tanto, el camino que tiene es someterse a la justicia.
“La ley 2272 se refiere, en el artículo 2, a una situación en la cual se excluye a personas que han firmado procesos de Paz, de ser beneficiarios de esta ley. La alta instancia está en la definición de calificación de quiénes son grupos de alto impacto”, explicó.
Excarcelarán a seis de disidencias
El comisionado de Paz anunció que el Gobierno solicitará a jueces la excarcelación de seis integrantes de las disidencias de alias ‘Iván Mordisco’ para ser designados gestores.
Explicó que “lo cierto es que, si hubiera excarcelaciones, esas excarcelaciones son suspensiones temporales de una decisión judicial, la investigación judicial sigue y la privación la libertad se suspende unos días mientras se reúnen esas personas, después ellos vuelven a su sitio de privación de la libertad”.
La figura de gestor de paz está establecida en la ley para integrantes de grupos armados, que tienen la función de contribuir a gestionar e implementar acuerdos humanitarios durante la fase de diálogos.