A pesar de que se mantiene abierta la puerta a las conversaciones entre el Gobierno nacional y el comité del paro minero en el Nordeste y Bajo Cauca antioqueño, alrededor de una agenda que incluye crear un distrito para esta actividad, no se ve cercano que se levante este movimiento social, que se ha extendido por más de un mes. Ayer se realizaron más de 8 movilizaciones que afectaron el tránsito en las carreteras de viajeros por Semana Santa.
Al cierre de esta edición estaba previsto un consejo extraordinario de ministros en el municipio de Caucasia, Antioquia, el cual fue convocado por el presidente Gustavo Petro con miras a acelerar las soluciones que permitan levantar este movimiento social.
El paro minero es hasta el momento la protesta más larga, con mayor participación y afectaciones en lo que va de este Gobierno, que en las primeras tres semanas restringió la movilidad por los bloqueos, el abastecimiento de alimentos y el comercio en más de 13 municipios de Antioquia y al menos 6 más en el sur del departamento de Córdoba. Además, se registraron varios episodios de violencia, como la quema de vehículos.
El comité pro paro minero anunció que durante la Semana Santa continuarán con sus protestas hasta que el Gobierno nacional garantice que puedan seguir desarrollando esta actividad, de la cual derivan su sustento.
Saúl Bedoya, vocero de este comité, aseguró que van más de 2 semanas sin que se produzcan diálogos con los delegados que envió el Gobierno nacional a la región.
“Persistimos en la misma posición, hasta tanto el Gobierno Nacional se siente nuevamente con nosotros y se pueda levantar la protesta de manera justa, porque queremos es trabajar y producir”, dijo el minero.
Tras conocerse que el presidente Petro tenía previsto liderar ayer en Caucasia, Antioquia, un consejo extraordinario de ministros, los mineros organizaron siete puntos de concentración para darle el ‘recibimiento’ al Jefe de Estado con protestas en este municipio, así como en Valdivia, Tarazá, Cáceres y Puerto Libertador, este último en Córdoba.
El pasado 12 de marzo el presidente Petro fue a la región del paro minero al liderar un consejo de seguridad en el municipio de Montelíbano, Córdoba, en donde se analizó la situación que se presenta con el orden público y afectación a la población así como por varios episodios de violencia.
En esa oportunidad el Jefe de Estado dejó entrever que el Clan del Golfo estaría detrás de las acciones violentas que se produjeron en las primeras semanas del paro minero, pues la minería criminal es junto con el narcotráfico las rentas ilegales que más dinero le reporta a ese grupo.
Frente al episodio de la quema de dos ambulancias, en donde uno de los vehículos transportaba a una mujer en trabajo de parto, a quien hicieron bajar junto con el conductor para luego prenderle fuego al automotor, Petro advirtió en esa oportunidad que “estos jóvenes no han recibido estudio y por ello ni saben que se convirtieron en violadores de derechos humanos. No les importa. Recibieron dineros del Clan del Golfo para hacer daño y hacer pasar esa violencia como un paro social. Dañan a su propio pueblo y a su familia”.
Días después, el Gobierno dio por terminado el cese el fuego bilateral que había pactado desde el pasado primero de enero y hasta el próximo 30 de junio, argumentando el incumplimiento por parte de esta organización criminal.
Los diálogos
El viceministro general del Interior, Gustavo García, lideró la instalación de una serie de mesas técnicas de diálogo, trabajo y concertación para abordar las propuestas del Distrito Minero que se tiene contemplado establecer en la región del Bajo Cauca y Nordeste Antioqueño.
En los municipios de Caucasia, Cáceres, El Bagre, Nechí, Tarazá y Zaragoza, se escucharon a las comunidades para avanzar en la conformación del Distrito Minero, productivo y de transformación económica en beneficio de los habitantes y la región en aspectos sostenibles y de ingresos.
Según, el Gobierno nacional las jornadas desarrolladas los días jueves 30 y viernes 31 de marzo ‒ en articulación con los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible, y de Minas y Energía, y el acompañamiento de autoridades departamentales y locales ‒, plantearon iniciativas en el marco del respeto por el ecosistema y el fortalecimiento del aparato producto, así́ como de garantías laborales y de seguridad para aquellas personas que se desempeñan en la explotación minera ancestral y artesanal dentro del marco que establece la ley.
En las mesas instaladas en la que participaron alrededor de 2.250 personas se establecieron temáticas como situación humanitaria y paz, Distrito minero y productivo, agropecuaria y pesquera, socioambiental y restauración ecológica, y de enfoque diferencial.
“Lideramos la apropiación de la ciudadanía del proyecto de distrito minero y productivo del Bajo Cauca, buscamos soluciones efectivas nacidas desde el territorio para una transición rápida y sostenible”, indicó el viceministro García en sus redes sociales.
En medio de estas sesiones de construcción participativa, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) con apoyo de las Fuerzas Militares, entregaron ayudas humanitarias y kits de aseo que aliviaran a cerca de 400 mil personas que se vieron afectadas por los bloqueos y movilizaciones del paro minero realizado en esta región de Antioquia.
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Los diálogos hechos en estos seis municipios totalizaron 31 mesas de trabajo, que fueron lideradas por una dupla de moderador y relatores de funcionarios y voceros de la comunidad, en el marco de los principios de escucha activa y respeto a las diferencias, desde un enfoque regional teniendo como soporte el eje de transformación Ordenamiento del Territorio Alrededor del Agua del Plan Nacional de Desarrollo Colombia Potencia Mundial de la Vida.
Las propuestas
El Gobierno Nacional presentó a los mineros una propuesta de formalización y creación de un Distrito minero como ruta para resolver el paro en el bajo Cauca, medida que no se implementa en el país desde hace más de tres décadas.
«Hemos venido trabajando en una propuesta que permita dar solución a la informalidad minera y detener las gravísimas afectaciones ambientales producidas por las retroexcavadoras que movilizan casi 30 millones de toneladas de tierra y las acciones que ponen en riesgo al río Cauca por el uso del mercurio a diferentes escalas», explicó la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad.
La principal propuesta, de acuerdo con la jefa de la cartera ambiental, es la conformación de un Distrito Minero. «La idea es establecer un Distrito Minero y una ruta de formalización que atenúe los impactos ambientales y ayude a entrar a la formalización a los mineros que son del territorio; Para construir esto, mañana se propondrá una mesa técnica conjunta”, expresó.
Por su parte, el ministro del Interior, Alfonso Prada, insistió en que la violencia y las afectaciones a la población de la región no son la salida. «Le hemos comunicado a los voceros que están en el territorio, a través de cinco viceministros, que bajo ninguna circunstancia el Gobierno Nacional va a seguir dialogando en la medida que no haya atención humanitaria a la población. Mientras persistan los bloqueos, la posibilidad de que regresemos a la mesa es nula», señaló.
El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, se refirió a la propuesta que llevará mañana a la mesa en Caucasia: «el Distrito Minero puede ser y debe ser el canal para la formalización de la minería en su conjunto en el Bajo Cauca y en el nordeste», concluyó.
El proceso lo acompañan instituciones garantes, como la ONU, la Iglesia y la Defensoría del Pueblo, entre otras.