La iniciativa cuenta con ponencia positiva para su segundo debate
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Con viento en popa avanza en el Parlamento el proyecto de ley para convocar una asamblea nacional constituyente con el fin de efectuar una reforma integral y estructural a la justicia, debido a que hasta el momento no se ha podido hacer por la vía del Parlamento. Una muestra del interés que despertaría esta iniciativa en algunos sectores congresionales es que la ponencia que pide darle debate fue presentada hace unos días, poco antes de finalizar el primer periodo de esta última legislatura.
El proyecto de ley (98/17 Senado) fue presentado el pasado 22 de agosto por la senadora Viviane Morales Hoyos y aprobado en primer debate en la Comisión Primera de esta Corporación el pasado 5 de diciembre.
Siete días después fue radicada ponencia positiva para segundo debate, en un hecho que se podría decir atípico porque no es usual en el Parlamento que esto se haga tan rápido, más teniendo en cuenta que se estaba en cierre de periodo legislativo.
No obstante este paso es fundamental para el proyecto de ley orientada a convocar una constituyente limitada al asunto de la reforma a la justicia, pues con ponencia positiva en mano será una de las primeras iniciativas que abordará la plenaria del Senado de la República a mediados de marzo próximo, cuando el legislativo retornará a sesiones.
Iniciativa frustrada
La reforma a la justicia se ha visto frustrada en los últimos años a pesar de varios escándalos producidos en la Rama. Vale recordar que la reforma que el gobierno del presidente Santos promovió en el año 2012, tras ser aprobada en un extenso trámite en el Congreso, el propio Jefe de Estado terminó hundiéndola por comprobarse que en la conciliación los parlamentarios a cargo incluyeron de manera ilegal disposiciones que favorecían a congresistas y magistrados.
Posteriormente, el Gobierno tuvo un segundo traspié cuando la Corte Constitucional tumbó la mayoría del componente judicial en la reforma de Equilibrio de Poderes, aprobada en 2015.
A partir de estos últimos fracasos es que en el Congreso se han escuchado voces culpando a la justicia porque supuestamente no quiere reformarse y, por ello, parlamentarios como Claudia López y Viviane Morales han señalado la necesidad de hacer la reforma por la vía de una asamblea nacional constituyente.
Al Gobierno nacional no le suena una constituyente para este tema, pero tampoco el presidente Santos quiere despedirse el próximo 7 de agosto sin dejar andando la reforma a la justicia. Por ello el Ejecutivo está liderando el diálogo con las altas Cortes y espera reactivarlo con el Congreso en marzo próximo.
En el XII Encuentro de la Jurisdicción Constitucional, celebrado en la ciudad de Pasto en septiembre pasado, el presidente Santos dijo a los magistrados de las altas Cortes sobre la reforma a la justicia que “el país la necesita. El país la reclama. Pero no debe convertirse en un factor más de división, ni de polarización”.
Añadió en esa oportunidad el Jefe de Estado que “a estas alturas, para que una reforma de este tipo salga adelante se requiere un amplio consenso en el fondo y en la forma. No se hará nada sin que esto tenga un amplio apoyo de todos los sectores no solo políticos sino de la sociedad”.
Explicó que “para que la reforma sea posible debe ser producto de un gran acuerdo nacional. Un acuerdo incluyente, que convoque a la Rama Judicial; la Fiscalía General; la Procuraduría; los partidos políticos; la sociedad civil; la academia; las facultades de Derecho; y a la comunidad en general”.
No obstante, la senadora Viviane Morales aseguró que se hace necesario impulsar la reforma a la justicia por la vía de una constituyente porque, según ella, el Congreso ha sido incapaz de reformarla.
“En este Congreso se han estudiado 46 proyectos de reforma constitucional a la justicia, 36 de origen parlamentario y 10 de origen gubernamental y no se ha podido hacer una reforma profunda a la Justicia”, señaló.