COLOMBIA NO será tema prioritario en la campaña electoral presidencial de los Estados Unidos. Así lo han manifestados decanos de Ciencias Políticas e Internacionales de reconocidas universidades del país, quienes consideran que la migración desde Centro hasta Norteamérica, la guerra ruso-ucraniana y el conflicto en Medio Oriente terminarán por acaparar la agenda proselitista de carácter internacional del republicano Donald Trump y de la demócrata, Kamala Harris, ambos candidatos a acceder a la Casa Blanca en los comicios de noviembre.
Esto es a pesar de las decisiones emanadas desde el Senado de los Estados Unidos, donde se ha hablado mucho sobre la crítica situación que se vive en esta nación por la disminución en la erradicación de cultivos ilícitos por parte del gobierno del presidente Gustavo Petro, lo que llevó a los congresistas a aprobar una significativa reducción de la ayuda económica que Washington otorga todos los años a Bogotá.
A pesar de ello y de la percepción poco favorable que se tiene del mandatario colombiano en el Congreso de EE.UU., nuestro país, según los expertos consultados por EL NUEVO SIGLO, podría tener más o menos relevancia en los discursos de los candidatos a la presidencia según su posición ante los comicios presidenciales del 28 de julio en Venezuela y frente a las acciones que tome para mantener en control la migración.
Sobre el tema, el decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de la Sabana, Carlos Arévalo, manifestó que en la campaña presidencial de los Estados Unidos se van a presentar dos posiciones muy distintas: una muy marcada por la posición demócrata, por ejemplo, de apoyo a Volodímir Zelenski en Ucrania; mientras que, por otro lado, la del candidato Donald Trump, que seguramente va a ser mucho más enfocada en los asuntos propios de Estados Unidos y aquellos temas internacionales que puedan tener alguna relevancia a nivel interno.
“Pensando en eso, si bien América Latina sigue siendo, tanto para republicanos como para demócratas una región muy importante, la principal preocupación frente a esta zona siguen siendo Cuba y Venezuela”, manifestó el decano.
Pero también dijo que “Colombia puede jugar un papel importante en lo que pueda pasar en Venezuela, sobre todo después del 28 de julio. Pero no está entre las prioridades de la agenda de política internacional y de discusiones entre candidatos en temas internacionales lo que va a estar pasando en Colombia: ni el tema de la paz o que se pierda un aliado estratégico en los Estados Unidos. Hay asuntos en la región y a nivel mundial que son de mayor relevancia”.
Por su parte, Julio Londoño Paredes, exministro de Relaciones Exteriores y decano de la Facultad de Estudios Internacionales de la Universidad del Rosario, manifestó que el peso político de Colombia en la campaña presidencial de Estados Unidos será indirecto, sobre todo si colabora o no con impedir la migración masiva hacia el norte.
Asunto de primer orden
Sobre este tema también habló el decano de la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana, Sebastián Lippez de Castro, quien indicó que, aunque para Colombia es importante lo que suceda en la campaña electoral en los Estados Unidos, nuestro país no necesariamente será un asunto de primer orden para los candidatos norteamericanos.
“Será importante para Colombia en la medida en que la política exterior de este país puede tomar algunos tonos particulares en relación con la cooperación, la ayuda y relacionamiento con nuestra nación. Sin embargo, Colombia en la campaña no será necesariamente un asunto de primer orden y no será un asunto que ocupe la agenda de los candidatos, ni de Kamala Harris ni de Donald Trump”, destacó.
Lippez indicó que hay asuntos complejos en el escenario global. “Sabemos que en la política exterior estadounidense el Medio Oriente ocupa un lugar prioritario en el debate, mucho más en los últimos años con toda la situación que se vive en Gaza. Entonces, ciertamente ese será uno de los asuntos más importantes en la campaña y, por supuesto, otros temas relacionados, por ejemplo, con el conflicto ruso-ucraniano y los procesos migratorios globales”, puntualizó.
Por lo mismo, declaró que “siendo esos los temas desde el punto de vista internacional, mucho más importantes y de mayor interés para los votantes y las campañas, el asunto de Colombia se abordará de manera tangencial, muy probablemente. Como se ha visto de manera tradicional, con una mirada mucho más cercana desde el Partido Demócrata”.
Además, dijo: “Posiblemente en el contexto del gobierno actual con una posición tal vez mucho más recelosa por parte de la candidatura republicana, pero no se anticipa que realmente sea un asunto de mucho interés”.
Pero también aseguró que la importancia que Estados Unidos dé a Colombia durante la campaña estará supeditada a la participación de la diáspora de nuestro país, sobre todo en el estado de Florida.
“En cualquier caso, hemos visto también que la política exterior del presidente Petro, aunque no ha significado un giro absoluto ni por supuesto resquebrajar las relaciones con los Estados Unidos, de alguna manera, busca diversificar esa mirada hacia otras latitudes, seguir ese ideal constitucional de afianzar las relaciones con los vecinos, con la región, con América Latina y el Caribe particularmente”, indicó.
Mientras tanto, Angelika Rettberg, decana de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de los Andes, destacó que si algo resaltará durante la campaña presidencial en los Estados Unidos, tanto por parte de Trump como de Harris, será el polémico asunto de la migración. “También habrá un poquito de biodiversidad”, indicó la profesora y politóloga a EL NUEVO SIGLO.
Cree que, a diferencia del Congreso y en campañas presidenciales de otras épocas, el tema del narcocultivo en Colombia no será tratado con tanta intensidad. “EE.UU. está más enfocado ahora en sus crisis internas de drogas ilícitas como el fentanilo”, destacó.
“América Latina sigue siendo una región de poco interés económico para Estados Unidos, comparada con otras regiones del mundo. El único tema latinoamericano que suscita interés y mucho temor en EE.UU. son las olas migratorias que entran por el sur del país. Antes, América Latina tenía un valor geopolítico importante para Estados Unidos, pero eso ha ido disminuyendo. Ni siquiera la posibilidad de recuperar la democracia en Venezuela parece motivar hoy a los Estados Unidos lo suficiente como para querer asumir mayores responsabilidades en la región”, dijo.
Por lo tanto, especifica: “Pienso que no, que Colombia no tiene ninguna importancia en el debate electoral de los Estados Unidos”.
<DESTACADO> “Colombia puede jugar un papel importante en lo que pueda pasar en Venezuela, sobre todo después del 28 de julio. Pero no está entre las prioridades de la agenda de política internacional y de discusiones entre candidatos”