![SUSANA MUHAMAD SUSANA MUHAMAD](/sites/default/files/2025-02/03%20A%20L%20PROTA%20SUSANA%20MUHAMAD%20FEB%2010.jpeg)
El accidentado e inédito consejo de ministros televisado la semana pasada continúa agravando la marcada crisis de gobernabilidad de la Administración Petro, generando de paso la cuarta gran crisis de gabinete en apenas dos años y medio.
El sábado se confirmó que la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, había presentado su carta de renuncia al jefe de Estado. Y, ayer en la tarde, este pidió la dimisión protocolaria de todo el gabinete (propuesta inicial y fallida del titular del Interior, Juan Fernando Cristo) y de los directores de departamentos administrativos con el fin de realizar ajustes para acelerar la implementación del programa de gobierno que presenta muchos retrasos. De hecho, en el controvertido consejo de ministros el mandatario admitió que de 195 compromisos del Ejecutivo hay incumplimientos en 146, lo que constituía una “vergüenza”.
Así las cosas, en los últimos dos meses han salido del Gobierno los titulares de Hacienda, Transporte, TIC, Relaciones Exteriores, así como los de Cultura y Ambiente, estos dos últimos como consecuencia del caótico consejo de ministros, en donde hubo una abierta ‘rebelión’ por la polémica designación presidencial de Armando Benedetti como jefe de gabinete y de Laura Sarabia en la Cancillería. Hasta el recién nombrado director del Departamento Administrativo de Presidencia, Jorge Rojas, dio un paso al costado. Y ahora habrá más cambios. Por ejemplo, anoche mismo la ministra de Trabajo presentó renuncia irrevocable.
A lo anterior, hay que sumar relevos recientes en superintendencias, DIAN, Migración Colombia, embajadas, viceministerios y otras instituciones del Gobierno Nacional Central.
Se agrava, entonces, el lesivo escenario de interinidad en la Casa de Nariño que, a su vez, ahonda la crisis de gobernabilidad y malos resultados del Ejecutivo. Lo que se traduce, además, en una parálisis del aparato estatal en medio de un escenario con problemáticas graves en economía, situación fiscal, seguridad, política de paz y muchos flancos más.