Casas de Maduro y Santos | El Nuevo Siglo
Lunes, 9 de Noviembre de 2015

Pese a las diferencias entre los gobiernos Maduro y Santos, hay coincidencias paradójicas en sus respectivos programas de gobierno. Por ejemplo, mientras que en Colombia se espera entregar en menos de dos semanas la casa gratis número 100 mil, precisamente en el corregimiento El Salado (Bolívar), en Venezuela la urgencia del presidente Maduro es llegar al millón de casas subsidiadas entregadas. Ya va en 800 mil y el jueves pasado dijo que si a diciembre  31 no ha completado el millón de estas viviendas, se quita el bigote. La pregunta que muchos se hacen es si menos de dos meses le alcanzarán al chavismo para entregar esas 200 mil casas restantes, programa que, dicho sea de paso, tiene un claro objetivo electoral ahora que ese país está a menos de un mes de las elecciones parlamentarias.

Dudas gubernamentales

En altas fuentes gubernamentales hay quienes todavía no están seguros de que la estrategia del plebiscito reformado sea la más adecuada para un eventual proceso de refrendación popular  de un acuerdo de paz con las Farc. Aunque el proyecto será impulsado con un mensaje de urgencia en el Congreso, hay algunas voces de muy altas esferas del Ejecutivo con dudas debido a que la jurisprudencia de la Corte Constitucional al respecto define muy bien la naturaleza de cada uno de los mecanismos de participación popular y su objetivo. Se teme que en la idea del plebiscito haya un exceso de “pragmatismo político coyuntural” y se esté desconociendo que el alto tribunal podría pronunciarse de fondo sobre el acto legislativo si considera que desnaturaliza lo que es el plebiscito.

Agua, luz e imagen presidencial

Un experto en el tema de servicios públicos recordaba días atrás que el manejo que el Gobierno dé a la difícil coyuntura que le espera al país por cuenta del fenómeno climático de El Niño, que tendrá sus picos altos entre enero y febrero próximos, dependerá la evolución positiva o negativa de la imagen y popularidad presidencial.  Recordó que si llega a presentarse un racionamiento de agua y luz muy marcado o que afecte a grandes porcentajes de la población, eso implicará un castigo político muy drástico para el Gobierno.

El ejemplo de Rousseff

El mismo experto trajo a colación que cuando El Niño hace más de una década golpeó duramente a Brasil, Dilma Rousseff era en ese entonces ministra de Energía del gobierno Lula, por lo que le tocó manejar el plan de choque para evitar un apagón drástico en todo el país. Incluso pactó con los industriales una estrategia para reducir la demanda del fluido eléctrico con base en incentivos y regulación productiva, estrategia que le dio resultados  positivos y fue la plataforma que la proyectó no sólo como la ministra estrella de Lula sino como su más fuerte carta para la sucesión presidencial.

Caso Pretelt

“No hay el menor chance”. Esa fue la respuesta que dio un experimentado senador tras ser interrogado sobre si operaría el ajedrez de las bancadas partidistas  en el proceso que en la Cámara y posiblemente en el Senado se le seguirá al magistrado de la Corte Constitucional, Jorge Ignacio Pretelt. Este, como se sabe, fue imputado por la Comisión de Investigación y Acusación el jueves pasado, sindicándolo del delito de concusión en el conocido caso de la tutela de Fidupetrol. Según el senador es muy posible que Pretelt se convierta en el primer alto magistrado cuya acusación sea aprobada por la Cámara y luego desaforado por el Senado, para terminar siendo juzgado por la Corte Suprema de Justicia.