LEY DE BANCADAS (I). Se le preguntó a uno de los congresistas de los partidos de oposición en la Cámara de Representantes si habría alguna posibilidad de que el Gobierno empiece a hablar “uno a uno” con parlamentarios por fuera de la coalición de centroizquierda para convencerlos de que voten por Martha Alfonso para la presidencia de esa corporación legislativa. Esto en el marco del pulso interno en la Alianza Verde, en donde es claro que el petrismo impulsa la opción de Alfonso para evitar que Catherine Miranda, dura crítica de la Casa de Nariño, sea la aspirante única de ese partido para tomar las riendas de la Cámara a partir del 20 de julio.
LEY DE BANCADAS (II). “... No sé hasta qué punto los partidos permitan que en la elección de las mesas directivas de Senado y Cámara los parlamentarios se salgan de las directrices que adopte cada uno en su respectiva reunión de bancada... Esta decisión es una de las pocas circunstancias en el Congreso en donde, realmente, la aplicación de la Ley de Bancadas es posible, salvo que se dé libertad para votar como cada quien considere... Por el momento, todavía no se sabe de contactos de nadie de la Casa de Nariño o de los ministerios sobre este tema de la presidencia de la Cámara... Todo está pendiente de la reunión que van a tener los candidatos de los verdes para definir las reglas del juego con miras a escoger candidato único”, señaló la fuente parlamentaria consultada.
A LO MATURANA. En el marco de los balances que se están haciendo sobre lo que fue la segunda legislatura que terminó el jueves pasado y lo ocurrido con las principales reformas gubernamentales en la mitad de este cuatrienio legislativo, algunos analistas han traído a colación que el Ejecutivo está acudiendo a la lógica de quien fuera técnico de la selección Colombia y el Atlético Nacional, Francisco Maturana, en torno a que “perder es ganar un poco”. Sostienen los analistas que es evidente que en dos años la Casa de Nariño solo ha podido sacar dos de las grandes reformas que ha planteado: pensional y tributaria. El resto se han hundido o no fueron radicadas.
GABINETOLOGÍA (I). En el marco las hipótesis que se están planteando sobre cuáles ministros podrían salir en el inminente remezón del gabinete solo hay dos nombres que se consideran intocables: los del canciller Luis Gilberto Murillo y el de Comercio, Luis Carlos Reyes. ¿La razón? El primero se posesionó semanas atrás como canciller titular, luego de varios meses como interino, y el segundo asumió hace apenas unos días, tras dejar la dirección de la DIAN.
GABINETOLOGÍA (II). Entre los ministros de la línea dura petrista que podrían salir se mencionan los nombres de los titulares de Salud y Defensa, Guillermo Jaramillo e Iván Velásquez, respectivamente, ambos muy desgastados y con sus sectores en crisis. También se habla de algunos integrantes del gabinete que el propio presidente Petro considera como "miedosos". Entre estos estarían algunos ministros que no han completado ni un año en el cargo.