Se espera, tras los anuncios de las Farc y el Gobierno días atrás, que antes de terminar este mes se esté oficializando en La Habana el acuerdo sobre el punto cinco, referido a las Víctimas, así como el primer borrador del consenso sobre el modelo de justicia transicional a aplicarle a los subversivos. Si ello es así, se abriría la posibilidad de que antes de terminar el año se puedan estar cerrando las tratativas sobre los cinco puntos básicos de la agenda pactada en 2012, y se entraría entonces a negociar lo relativo a los temas pendientes que han ido quedando a lo largo de los últimos tres años en la Mesa. Obviamente el del cese el fuego y hostilidades bilaterales y definitivas, continúa siendo uno de los grandes cuellos de botella, pero se espera que en menos de seis meses no sólo se concrete, sino que, e incluso, sus primeras etapas puedan iniciarse con antelación.
Por ahora no
La tesis de que la crisis en la frontera colombo-venezolana se desató por la extradición por parte de nuestro país de dos señalados narcotraficantes a Estados Unidos, que tendrían información clave sobre el llamado “cartel de los soles”, que integrarían altos mandos militares de la vecina nación, ha tenido poco eco en los tribunales norteamericanos. Incluso se dice que en el marco de la distensión que poco a poco se va abriendo camino entre Washington y Caracas, es muy baja la probabilidad de que se materialice en el corto tiempo un expediente formal contra generales venezolanos e incluso el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello. El año pasado prácticamente se daba por sentado que ese proceso judicial se abriría e incluso se girarían las órdenes de extradición respectivas, pero hoy se considera que la justicia estadunidense no se pronunciará en este sentido en el corto plazo.
Rebelión de ellas
Varias parlamentarias, por petición de dirigentes sociales de la frontera con Venezuela, estarían organizando un acto simbólico a nivel nacional para protestar por las afirmaciones de algunas autoridades venezolanas en torno a que una parte de las mujeres deportadas en los últimos días estaría ejerciendo la prostitución en el vecino país. Según conoció EL NUEVO SIGLO, la idea es que la mayor cantidad de mujeres colombianas en un día y hora determinadas luzcan un símbolo que sirva para rechazar las infames acusaciones que se han escuchado en la frontera e incluso para pedirle al Gobierno Santos que cree un programa para facilitar la repatriación de las nacionales que viven en Venezuela en difíciles condiciones. De igual manera, se estaría planteando que así como Maduro convocó a una marcha de colombianos en defensa de su “revolución bolivariana”, se haga lo propio en Bogotá con la colonia venezolana en protesta por los atropellos a los inmigrantes de nuestro país.
Ampliar emergencia
Tanto en La Guajira como en Santander e incluso en Arauca se han escuchado voces de dirigentes políticos, sociales, económicos e institucionales, exigiendo que el estado de emergencia económica y social que el Gobierno va a declarar el próximo lunes, no se centre única y exclusivamente a Cúcuta y Norte de Santander, sino que también se extienda de manera integral a esos otros departamentos, que también han sido afectados por la crisis fronteriza de los últimos quince días. Aseguran allí que han recibido, aunque gota a gota, centenares de personas que han huido de Venezuela para evitar ser deportadas o perder sus pertenencias ante los atropellos de las autoridades de ese país.