En fuentes del Congreso se rumora que al presidente Santos no le gustó para nada que el grueso de la coalición de Unidad Nacional se hubiera opuesto al retiro del artículo sobre fuero militar que hace parte del texto del proyecto de reforma a la justicia, pero que en el cónclave en la Casa de Nariño el pasado miércoles prefirió, quizá porque el escenario temático de la reunión era muy amplio, no plantear un pulso directo con los jefes de los partidos pero dejó en claro que tratará el tema de forma individual con cada colectividad. Incluso, fue claro en advertir que el viernes (ayer) se radicaría el proyecto autónomo del Gobierno y que “esperaba” que la iniciativa fuera apoyada como prioridad de la agenda parlamentaria.
Exenciones por Selección
La puja entre varias ciudades para ser la sede de la Selección Colombia de fútbol mayores, llegará al Congreso, en donde algunos senadores y representantes quieren plantear un debate sobre los riesgos que para las finanzas de algunas ciudades capitales implican las exenciones en materia de impuestos y otras gabelas económicas que están ofreciendo sus respectivas administraciones para ser escogidas como las anfitrionas del combinado de balompié. Los congresistas consideran que debe limitarse la discrecionalidad de los mandatarios para ofrecer ese tipo de flexibilidades tributarias a distintos eventos.
Más proyectos
Pero no será ese el único tema futbolístico que llegará al Parlamento en las próximas semanas. Como ya se sabe, se radicará un proyecto de ley que busca hacer de las transmisiones en televisión de los partidos del campeonato local un asunto de “interés público”, lo que implicaría que todos los colombianos tendrían derecho a ver los cotejos, sin importar si están afiliados a determinado cable operador o tienen restricción para sintonizar algún canal privado.
Ojo a la FIFA
Aunque el proyecto no se ha radicado, ya hay voces parlamentarias que plantean reformas. Por ejemplo, un senador indicó que debía tenerse cuidado en esta clase de legislaciones de corte “intervencionista” pues siempre está latente el celo excesivo de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) que no admite injerencia extrema de los gobiernos nacionales en asuntos relacionados con los campeonatos avalados directa o indirectamente por ese ente rector. Obviamente aquí debe diferenciarse en que las negociaciones de los derechos de transmisión están en cabeza de la Dimayor (que agremia a los equipos de la primera categoría) y no de la Federación Nacional, que sí tiene lazos directos con la FIFA.
Imitar a gauchos
Otra de las propuestas que se pondría sobre la mesa para permitir que la señal de los partidos de fútbol local pueda ser vista por todos los televidentes del país buscaría imitar lo que pasó en Argentina, en donde el gobierno Kirchner compró los derechos de transmisión (obviamente con dineros públicos) por considerarlo un asunto de interés público y de esta forma todo operador público o privado de televisión puede colgarse de la señal y transmitírsela a sus respectivos afiliados.