Tras el pico epidemiológico de influenza presentado desde el mes pasado en el país, muchas personas han confundido este malestar con un resfriado común, pero existen señales que nos ayudan a prevenir los efectos y complicaciones más graves de una influenza no diagnosticada.
La influenza es una contagiosa enfermedad respiratoria generada por un virus, llamado de la influenza, el cual puede llegar a causar una enfermedad leve o grave en cada individuo.
Según el Instituto Nacional de Salud, en el país este año han sido reportados 162 casos, de los cuales el 24% se han registrado en Bogotá.
Síntomas de la influenza
De acuerdo con la Clínica Mayo de Estados Unidos, la influenza puede parecer un resfriado común con estornudos, secreción nasal y dolor de garganta. Sin embargo, hay que aclarar que son dos enfermedades diferentes. La Clínica Mayo explica que la influenza comienza repentinamente, mientras que el resfriado se desarrolla lentamente.
Los síntomas comunes de la influenza son: fiebre por encima de los 38 °C, dolor muscular, escalofríos y sudores, dolor de cabeza, tos seca y persistente, fatiga y debilidad, congestión nasal y dolor de garganta
Además, la influenza, según los médicos, se puede transmitir de una persona a otra con mucha facilidad, ya sea por la saliva u objetos que estén contaminados. El virus viaja en gotas por el aire, cuando alguien que tiene la infección habla, estornuda o tose puede ser un potencial transmisor.
Estas gotas también pueden ser inhaladas o entrar en contacto con los gérmenes encontrados en algún objeto, como el teclado de la computadora o el teléfono, y transferirlos a la nariz, los ojos o la boca.
Las personas que corren mayor riesgo de contraer la enfermedad son: personas mayores de 65 años, mujeres embarazadas, niños menores de 5 años, mujeres en un período de dos semanas luego del parto, personas obesas y quienes padezcan enfermedades crónicas
La influenza afecta directamente las vías respiratorias y cuando no es tratada como se debe, puede complicarse, desencadenando otras afecciones como bronquitis, infección de los oídos, problemas cardiacos, brotes de asma y la complicación más grave: neumonía.
"Aunque la vacuna anual contra la influenza no es cien por ciento efectiva, sigue siendo la mejor defensa contra la gripe", indica la referida Clínica Mayo, que advierte que "la gripe se resuelve por sí sola. Sin embargo, a veces, la gripe (influenza) y sus complicaciones pueden ser mortales".
Para evitar ser contagiado con este virus, se recomienda el uso del tapabocas, una adecuada hidratación y alimentación que ayudan a mantener fuerte el sistema inmunológico. Además, es importante aplicarse la vacuna anual contra la influenza, que desde mayo está a disposición de los ciudadanos de forma gratuita.