Ojo: productos de limpieza pueden afectar sus pulmones | El Nuevo Siglo
Foto cortesía Mayo Clinic
Martes, 6 de Noviembre de 2018
Redacción Sociedad con Mayo Clinic
No mezclar productos, mantener ventilada el área donde los usamos y lavarse las manos después de usarlos son claves para evitar efectos en la salud

 

LAS mujeres que regularmente usan productos de limpieza, en especial aquellos que funcionan como productos profesionales, pueden con el tiempo sufrir un deterioro más rápido de la función pulmonar, descubrió un reciente estudio internacional.

Aunque el estudio no haya examinado ningún producto específico, vale la pena escoger productos de limpieza con pocas sustancias químicas potencialmente tóxicas o productos alternos como vinagre blanco, bicarbonato sódico o carbonato de sodio. A la hora de utilizar estos productos se recomienda mantener bien ventilada el área y nunca mezclar un producto con otro.

La doctora Clayton Cowl, de Medicina Preventiva, Ocupacional y Aeroespacial de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota explica que la función pulmonar de todos se deteriora lentamente a partir de los 35 años, haciendo más difícil el transporte del oxigena a todos los tejidos del cuerpo y disminuyendo la cantidad de aire que fluye a través de los pulmones. La edad también vuelve menos flexible a la pared torácica y el abdomen, lo que puede interferir con la capacidad de aspirar profundo.

Existen otros factores que pueden alterar la función pulmonar, por ejemplo, desde hace mucho se sabe que fumar contribuye al deterioro precoz del sistema respiratorio, también se ha sospechado que la exposición regular a sustancias irritantes, como polvo y gases químicos, desempeña un factor de riesgo mayor. Los resultados del estudio que examina el uso de productos de limpieza constituyen una evidencia más de ello.

Como parte de la investigación, se estudió durante dos décadas a 6000 participantes. Los investigadores descubrieron que las personas que usaron productos de limpieza en espray por lo menos una vez por semana, mostraron un deterioro más rápido de lo normal en su función pulmonar. Las mujeres que desempeñaron trabajos de limpieza profesional y estuvieron expuestas diariamente a estos productos, mostraron una tasa más rápida de deterioro de la función pulmonar.

La exposición a los productos de limpieza no se vinculó al deterioro de la función pulmonar en los hombres, pero eso quizás se debió a que solo participaron pocos en el estudio. Pese a que este estudio brinda información importante, los resultados no significan que sea peligroso limpiar su casa. No olvide que los participantes del estudio que se vieron mayormente afectados en su salud pulmonar fueron quienes tuvieron exposición diaria a los productos de limpieza con potencia industrial.

Para las personas que limpian sus casas, la primera medida sería reducir la cantidad de sustancias químicas que usan al limpiar. Por ejemplo, usar agua tibia y un paño de microfibra para limpiar las superficies, generalmente es igual de eficaz que rociar la superficie con el espray de un producto de limpieza, pero la diferencia está en que no se usan productos químicos.

Mientras limpia, procure tener cuidado de mantener separados los productos de limpieza, porque cuando se mezclan, los contenidos de ciertos productos desencadenan reacciones químicas peligrosas, como ocurre al combinar amoniaco con cloro.

Esa mezcla produce gases tóxicos que, al inhalarlos, provocan tos, dificultad para respirar e irritación de la garganta, los ojos y la nariz. También evite usar productos catalogados como irritativos para la respiración, como es el caso de ciertos ambientadores, de algunos suavizantes de telas y de los productos cáusticos para limpiar desagües y hornos.

Si desea garantizar aún más la seguridad de los productos de limpieza para su hogar, guárdelos en los envases originales para que sea fácil encontrar las etiquetas de advertencia, las instrucciones sobre seguridad y los ingredientes que contienen.

Recuerde siempre lavarse las manos después de usar los productos de limpieza, guardarlos fuera del alcance de los niños y mantenerlos alejados de los alimentos. Si usted o alguien en su casa accidentalmente ingirieran un producto de limpieza o presentaran una reacción a alguno de ellos, busque atención médica de inmediato.