Poncho, la Danta de Montaña que dejó un legado | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Lunes, 11 de Febrero de 2019
Redacción Nacional

Durante  15 años, Poncho, una danta de montaña (Tapirus pinchaque), estuvo bajo el cuidado de la CAM, convirtiéndose en el ‘embajador de las dantas’. Este mamífero alertó sobre la situación que enfrenta la fauna silvestre como el mercado ilegal, la caza y la pérdida de hábitats naturales.

Pero recientemente el animal falleció a causas naturales, tras enfrentar quebrantos de salud, propios de su edad senil.

El 23 de agosto de 2005, no fue un día normal para los funcionarios de la Dirección Territorial Sur de la Corporación Autónoma regional del Alto Magdalena-CAM, especialmente para el equipo de la Red Contra el Tráfico de Fauna y Flora, pues una denuncia realizada por un ciudadano, alertó sobre la presencia de un mamífero en una finca turística del municipio de Pitalito.

Un operativo, en el que también participó la Policía Ambiental, dejó como resultado la recuperación de una cría de danta de montaña o tapir de páramo, como también se le conoce. ‘Poncho’, nombre que recibió desde su llegada, tendría para entonces menos de un año de edad. Aún conservaba las manchas blancas, típicas de los ejemplares prejuveniles de su especie. En los meses posteriores, su pelaje se tornó a marrón oscuro.

Algunas indagaciones realizadas para la época, dieron cuenta de que ‘Poncho’, había sido sustraído del bosque, durante una jornada de cacería en la que los cazadores, también dieron muerte a su madre. Luego fue vendido en el mercado negro, con el fin de convertirlo en mascota y atractivo del centro recreacional.

Liberación

Tras el decomiso, la Autoridad Ambiental del Huila, en procura de brindar las mejores garantías de vida para el animal, luego elevar múltiples consultas a especialistas y siguiendo los protocolos establecidos, inició un proceso de recuperación y rehabilitación, que conllevó con la liberación de la danta en el año 2009.

Para este proceso, la CAM adquirió un vasto predio montañoso en la vereda Marbella del municipio de San Agustín, zona del Parque Natural Regional Corredor Biológico Guácharos-Puracé. En ese lugar, Poncho permaneció, cerca de cinco años, sin embargo, como consecuencia de su estado de improntación, que no le permitió asimilar su vida en un área natural, así como el riesgo de cacería al que se enfrentaba, para finales de 2013, Poncho tuvo que ser devuelto a la Finca Marengo, sede de la Dirección Territorial Sur de la CAM.

Educación ambiental

Su regreso, a la sede de la CAM en Pitalito, coincidió con la puesta en funcionamiento del Sendero Ecológico de Interpretación Ambiental del Macizo Colombiano, espacio dedicado a la educación ambiental y a la generación de una cultura amigable con los recursos naturales.

Durante los últimos cinco años, no sólo se convirtió en el ‘embajador’ de las dantas de montaña del mundo, si no en un verdadero amigo de las 25.500 personas que pudieron observarlo durante los recorridos realizados en el sendero.

Poncho alegró a los miles de niños que llegaron a Marengo, quienes, gracias a este ejemplar, conocieron más de cerca sobre la vida de las dantas de montaña.

Supieron que la especie Tapirus pinchaque   pasó de encontrarse en estado de conservación vulnerable (Vu) a considerarse en estado de Peligro de Extinción (EN) como lo determina, actualmente, la Resolución 1912 de 2017 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible-MADS y por medio de la cual se establece el listado de especies silvestres amenazadas en el territorio nacional.

Fue gracias a ‘Poncho’ que la CAM determinó que la danta de montaña, sería una especie priorizada con fines de protección a nivel departamental, al igual que el oso andino y el caimán del Magdalena, las cuales cuentan con planes de conservación en ejecución.

La necesidad de conservación de la especie, que se vislumbró con ‘Poncho’, ha quedado registrado con el desarrollo del Festival Nacional de Oso Andino y Danta de Montaña, que para el 2019 cumple su cuarta versión, y que cada año, convoca a los más reconocidos investigadores y especialistas en ambas especies, a debatir sobre la necesidad de asegurar la vida estos animales, de garantizar sus hábitats y sobre todo de evitar que casos como el de ‘Poncho’, se sigan presentando.

Museo de Historia Natural

En cumplimiento a lo establecido en la resolución 2064 del 21 de octubre de 2010 del Ministerio de Ambiente, que trata sobre el protocolo para la “disposición de productos, sub productos o especímenes muertos provenientes del tráfico ilegal”, la CAM hizo entrega del cuerpo de esta danta de montaña al Museo de Historia Natural de la Universidad del Cauca, donde permanecerá exhibido como patrimonio material de la humanidad.  Así mismo, serán entregadas réplicas en tamaño real de esta danta de montaña para que los huilenses las puedan conocer en los senderos interpretativos de educación ambiental de la CAM en Neiva y Pitalito