Twitter anunció cambios significativos en la forma en la que combate a los usuarios abusivos de su servicio.
La compañía ha sido criticada durante mucho tiempo por dar una plataforma a los llamados troles, usuarios que acosan deliberadamente a otros. Si bien el acoso a menudo es inofensivo, algunos troles han atacado a los usuarios con campañas de amenazas de muerte y otras actividades abusivas.
La empresa informó que ha revisado su algoritmo para identificar este comportamiento abusivo. Una vez que un usuario es identificado como un trol que está acosando, los tuits del usuario se ubicarán hacia abajo en las respuestas y búsquedas de Twitter, sin importar el contenido del tuit.
El concepto detrás del rediseño del algoritmo es reducir drásticamente la visibilidad de estos troles.
“Estamos abordando temas de comportamientos que distorsionan y desvirtúan la conversación pública en esas áreas integrando nuevas señales de comportamiento en cómo se presentan los tuits”, declararon Del Harvey y David Gasca, los directivos de Twitter.
“Al usar nuevas herramientas para abordar esta situación desde una perspectiva conductual, podemos mejorar la salud de la conversación y la experiencia de todos en Twitter sin esperar que la gente que usa Twitter nos reporte problemas potenciales”, aseguraron los directivos.
Desde su creación en 2006, Twitter se ha caracterizado por brindar una plataforma para el discurso público casi sin restricciones. Si bien la falta de censura ha sido un pilar clave para la popularidad del servicio, se han presentado problemas con grupos de odio y extremistas violentos que utilizan el servicio para difundir su mensaje.
El director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, explicó que el nuevo algoritmo es el más reciente paso para reducir el alcance de las cuentas problemáticas.
“Nuestras metas son conversaciones más sanas y cómo vamos a medir nuestro progreso”, tuiteó Dorsey este martes.
La compañía dijo que en las primeras pruebas en todo el mundo el nuevo algoritmo ha resultado en una disminución del 8% en el número de informes de abusos derivados de las interacciones del usuario en la plataforma.