A pocos días de que comience oficialmente la primera legislatura de este año, el próximo 16 de marzo, comienza a revivirse el debate que marcó buena parte de la agenda legislativa del año pasado: trabajar desde la presencialidad o en la virtualidad.

Si bien la Corte Constitucional consideró que el Congreso puede definir su propio modelo de trabajo legislativo y por ello se aprobó la reforma de la Ley 5 de 1992 –Reglamento Interno del Congreso- para permitirlo y ajustarlo a la nueva realidad producto de la pandemia del coronavirus, desde ya un grupo de parlamentarios alternativos le insisten a las mesas directivas de Senado y Cámara llamar a la presencialidad.

En carta enviada a los presidentes de Senado y Cámara de Representantes, Arturo Char y Germán Blanco, respectivamente, un grupo de 17 parlamentarios de diferentes bancadas de oposición advierten que temas como la anunciada Reforma Tributaria y la reforma al sistema de salud “se deben asumir con la mayor responsabilidad”, y ello implica debates presenciales guardando todos los protocolos de bioseguridad.

“La virtualidad no es la manera más efectiva para deliberar sobre asuntos tan importantes para el país por lo evasiva que podría resultar para algunos intereses”, dice un aparte de la misiva, que cita la sentencia C-242/2020 de la Corte Constitucional.

Un aparte de dicha norma señala que indicar que “la presencialidad es el mecanismo más adecuado para adelantar un debate democrático vigoroso, de una participación activa y libre, y de la expresión de todas las corrientes de opinión en circunstancias de mayor facilidad”.

Para los firmantes, es claro que a pesar de dicha sentencia, “en nuestro país sigue vigente la regla general de presencialidad para el funcionamiento del Congreso y demás corporaciones públicas de elección popular. Siendo la virtualidad una forma de deliberación subsidiaria y excepcional”.

Igualmente, los firmantes instan a las directivas de Senado y Cámara a “propiciar las condiciones para que, bajo estricto cumplimiento de los protocolos de bioseguridad sanitaria requeridos, se retome la presencialidad, lo que permitirá que decisiones de extremo interés para el país sean adoptadas de forma adecuada y no ligeramente detrás de la pantalla de un computador”.

La petición concluye recordando que temas trascendentales para el país que se avecinan en el Congreso de la República como la Reforma Tributaria, la reforma a la salud, varios actos legislativos y leyes estatutarias, entre otras, “por su importancia deben ser adoptadas de cara a los colombianos y previo debate serio y democrático que permita a los ciudadanos visibilizar el grado de responsabilidad con que sus parlamentarios defienden sus intereses”.

La petición la suscriben congresistas de los partidos Polo Democrático Alternativo, Partido Verde, Partido Comunes, Movimiento Alternativo Indígena y Social – Mais, Partido Dignidad y Coalición Decentes.

Sin embargo, voceros de los partidos de Gobierno han ratificado que defienden la legalidad de la virtualidad como mecanismo idóneo, avalado por el Congreso y la Corte Constitucional, mientras en el mundo entero se supera completamente la amenaza sanitaria por la pandemia de coronavirus.

Sesiones extras

De otro lado, trascendió que el Gobierno nacional no descarta la posibilidad de llamar al Congreso a sesiones extras a partir del próximo 9 de marzo, es decir una semana antes del inicio de la legislatura.

El tema, según las versiones extraoficiales, sería discutir el proyecto de ley que reglamentaría el acto legislativo 02 de 2009 que reforma el Sistema General de Seguridad Social en Salud.

En la legislatura pasada el proyecto llegó con mensaje de urgencia, pero al final de noviembre, por falta de tiempo, se decidió aplazar su discusión final para las sesiones de marzo en Comisiones Séptimas conjuntas.

Este proyecto fue presentado por Cambio Radical y cuenta con el respaldo del Ministerio de Salud, pero a su alcance se oponen los partidos alternativos que consideran un retroceso en materia del derecho a la salud en Colombia.

Sin embargo, oficialmente el Gobierno nacional, a través del Ministerio del Interior, aún no se ha pronunciado sobre el llamado a extras. Tampoco las mesas directivas de Senado y Cámara se han pronunciado sobre el llamado a sesionar de forma presencial.

Foto: La legislatura comienza el 16 de marzo, pero desde ya los partidos alternativos están reclamando sesiones presenciales en Senado y Cámara./ENS