La candidata presidencial por el partido Verde Oxígeno, Íngrid Betancourt, defendió los encuentros políticos con el expresidente Álvaro Uribe, a dos meses para las elecciones presidenciales y a pesar de que varios congresistas electos por ese partido han criticado esas alianzas.

“Es hora de dejar el odio y la polarización. La tolerancia, la escucha y el diálogo son las formas para reconciliarnos. El expresidente Uribe me invita a que hablemos, lo haré con la gratitud que le tengo por la operación Jaque que permitió mi liberación y la de 14 secuestrados más”, dijo Betancourt.

La candidata presidencial les salió al paso a las críticas rechazando la polarización y convocando un pacto contra la corrupción.

“Curioso ver cómo personas que nacieron de las entrañas del uribismo ahora se rajan las vestiduras juzgando como impropio hablar con quien tomó la decisión de mi liberación. Probablemente porque soy la única candidata que ha padecido la violencia en carne propia no puedo aceptar que se nos quiera de nuevo imponer la polarización como opción políticamente correcta. Al convocar a un gran pacto nacional contra la corrupción es indispensable no dejarnos llevar por el sectarismo”, señaló.

Respuesta de Uribe

Ayer, a través de un video y un comunicado, el líder del Centro Democrático aceptó la invitación y le contestó de la siguiente manera a Betancourt:

“Agradezco la generosa aceptación de la Dra. Ingrid Betancourt de dialogar con nosotros”.

“Con la Dra. Ingrid comparto sufrimientos de Patria”.

“En medio de mis defectos, mi vida pública ha sido de diálogo con la ciudadanía. Durante los 8 años de Gobierno dialogué intensamente con los compatriotas, trabajadores, empresarios, sectores sociales, comunidad en general, con alcaldes y gobernadores, sin importar el origen político de su elección, con aquellos de la oposición, por ejemplo con los gobernadores Horacio Serpa (qepd), Antonio Navarro, con los alcaldes Antanas Mockus, Luis Eduardo Garzón y Sergio Fajardo”.

“Cuando el No ganó el plebiscito nuestra respuesta fue la búsqueda de un acuerdo nacional para reformar los textos de La Habana, propuesta que nos negaron. Nunca pedimos que se cayeran los acuerdos como lo había dicho el Gobierno para el evento de que perdiera el plebiscito”.

“A diferencia de la fe, la verdad es un punto ideal, un concepto relativo, al cual se le enriquece con el diálogo”.

“Escucharemos a la doctora Ingrid con absoluto respeto, le hablaremos con el corazón. Nos unen la Patria y la democracia”.

El líder del Centro Democrático había cuestionado a quienes atacaban a la candidata presidencial por esta reunión a través de sus redes sociales: “¡Por qué maltratan a la doctora Ingrid! Yo no he robado un peso; he manejado los recursos públicos con transparencia y austeridad; no he financiado la política con mermelada ni con contratos del Estado; no entregué a SaludCoop, Café Salud, Caprecom, etc. a políticos que las saquearon”, señaló.

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Las críticas

Uno de los que la criticó fuertemente por esta cercanía fue Alejandro Gaviria, con quien compartió en algún momento la misma coalición. “Hipócrita y oportunista”, fueron las palabras del excandidato en contra de Betancourt.

Otra de las personas que cuestionó los encuentros con Uribe fue el senador electo Humberto de La Calle. En una carta  señaló que “resulta a todas luces incoherente buscar alianzas con partidos como el Centro Democrático. En este caso, además, somos enfáticos en decir que las ideas del expresidente Uribe contradicen a fondo nuestras convicciones y visión de país”.

Aprovechó para pedirle a Betancourt que, “tal y como establecen los estatutos, convoque a los órganos internos y democráticos del partido, de los cuales hacemos parte los congresistas elegidos, antes de tomar decisiones unipersonales e inconsultas, tal como ha ocurrido en otras oportunidades”.

Del mismo partido de Betancourt y De la Calle, el representante Daniel Carvalho aseguró: “Yo no me pienso ir de un partido en el que acabo de ganar una curul y como tal tengo derecho a un cargo directivo. Vamos a apelar a los mecanismos democráticos internos. Ahora bien, yo no estoy en desacuerdo con que la doctora Íngrid se tome un café con alguien, el problema es que se hable de una alianza electoral y no estoy dispuesto a apoyar al Centro Democrático en esta elección".