"La idea más peligrosa del mundo" | El Nuevo Siglo
Miércoles, 14 de Abril de 2021

“Esto significa Destino: estar enfrente y nada más que estar siempre enfrente.” 

Rainer María Rilke. 

El transhumanismo es la eventual realidad, dentro de un marco hipotético, más no, irreal. En un futuro poshumano, permeado por la ingeniería genética, biotecnología y evolución dirigida, el mundo conocido perdería todo su valor y pasaría a ser de antaño, como una cuestión vaga de la historia, en algunas enciclopedias quedaría, en ese entonces, lo que ya solo fuera historia. El olvido. 

Oswald Spengler, filosofo e historiador alemán, publicó en 1918 una profunda obra, titulada: La decadencia de Occidente. Justo entre la posguerra esta obra tomó gran revuelo, siendo por ejemplo el erudito Jorge Luís Borges, un devoto seguidor de esta. El argumento de Spengler es que las culturas, sin importar cuales fueren, atraviesan por las mismas etapas de un ser biológico (Juventud, Crecimiento, Florecimiento y Decadencia) hasta llegar a su desaparición.  

Untergang, en alemán decadencia, y en eso es en lo que según Spengler y muchos más, nos encontramos en este momento en lo que respecta a Occidente. Asimismo, el final declarado de Occidente, y de todo lo que ello significa y presupone para el mundo conocido, es la pandemia. La covid-19 es el principio del fin de esa decadencia advertida por Spengler. Si bien, la tesis de Spengler era pesimista, mientras más se acerca el mañana, se hace verídica.  

Eric Voegelin, va más allá que Spengler, afirma que el fin de Occidente será por una cuestión moral, por la negación del hombre con su origen, y por el abandono del hombre a su ámbito espiritual. Esa devastación espiritual, fundamentada por el laicismo y agnosticismo. El abandono a Dios sería la causa, si bien metafísica, acertada para este erudito alemán, sobre nuestra decadencia. El hombre ha entregado su destino al mundo, a lo material y a lo intrascendente, olvidando la cosmogonía divina.  

En este instante específico el mundo se enfrenta a sibilinos escenarios. Según el profesor Joseph Nye habría estos posibles escenarios para el 2030: El fin del orden liberal globalizado, nuevos autoritarismos al estilo de los años 30, un orden mundial dominado por China, una agenda internacional verde o simplemente “más de lo mismo”, es decir, se mantendría la rivalidad entre Estados Unidos y China, y la globalización en sí, como sistema. Al igual, el ex secretario de Estado, Henry Kissinger, escribió una reciente columna titulada: “La pandemia de coronavirus alterará el orden mundial para siempre”. 

Sin embargo, el transhumanismo es a lo que la humanidad entre mediano y largo plazo tendría que enfrentarse, claro, en un futuro poshumano, en donde la decadencia de Occidente sería historia, así como lo es la decadencia de Babilonia, Egipto y Grecia. Ahora bien, para el profesor Francis Fukuyama, autor de El fin de la Historia y el último hombre, el transhumanismo sería “la idea más peligrosa del mundo” pues su fin es cruzar la línea de la supeditada biología humana, hacía una modificación externa que desencadenaría un fenómeno antinatural e inmoral, en pro de ese extraño movimiento de liberalización que terminaría por destruir los últimos estamentos de la sociedad, sin importar credo, condición, origen y raza.  

@davidrosenthaal