Segunda oportunidad sobre la tierra para personajes de Macondo | El Nuevo Siglo
LA ARTISTA plástica pastusa, María Elena Caicedo ha creado 15 mini esculturas de los personajes de "Cien años de soledad".
Rubén Darío Escobar
Lunes, 5 de Junio de 2023
Redacción Sociedad

EN EL VESTÍBULO principal de la biblioteca del Gimnasio Moderno de Bogotá, un grupo de personajes de la novela “Cien años de soledad” parecen esperar la oportunidad de colarse entre los libros que inundan este recinto que, además de servir de punto de consulta de los diferentes ejemplares históricos de la institución, es un escenario de conciertos y charlas de distintos tópicos.

Por eso ver allí reunidos a José Arcadio Buendía, a Úrsula Iguarán, a Melquiades o a Remedios “La Bella” junto a otros protagonistas de la novela insigne de la literatura colombiana que trascienden al mundo, causa tanta curiosidad.

Personajes literarios

María Elena Caicedo es la mujer que lo ha logrado. Pastusa y artista plástica con formación en diferentes escuelas del país, pasó más de tres años perfilando e individualizando a cada uno de los personajes que pasaron a la historia de la literatura universal, gracias al Premio Nobel alcanzado por su autor, Gabriel García Márquez.

“Lo más complicado de este trabajo fue determinar a qué generación pertenecía cada personaje, los nombres se repiten mucho a lo largo del libro, entonces yo tenía que ubicarlos porque al inicio se habla de siete generaciones, entonces lo que hice fue determinar a qué momento correspondía cada personaje”, dice María Elena Caicedo quien ha presentado esta muestra en escenarios como la Feria del Libro de Bogotá, la Universidad de Pasto y en ferias internacionales de artesanías.

“Prima y esposa de José Arcadio Buendía se convierte en una empresaria de dulces y repostería muy próspera y exitosa, la propagación de la peste llega al pueblo en sus alimentos...”, dice entre otros apartes el texto que acompaña la escena de este personaje: la miniatura de Úrsula en medio de un espacio en donde aparecen diferentes viandas de dulces y pasteles, implementos de panadería y detrás de ella, una máquina de moler y una plancha de vapor, entre otros.



Técnica mixta

María Elena que se mueve entre los personajes como maestra de ceremonias, los presenta al público dando a conocer amplísimos detalles de los mismos, especialmente sobre los materiales que utilizó para elaborarlos: “Es una mezcla de cera de abejas y plastilina, diferentes pinturas con los que fui moldeando cada personaje y cada uno de los elementos que conforman las escenas que iba elaborando a medida que repasaba cada detalle. Para algunas de las escenas utilicé también miniaturas que había comprado en alguna oportunidad”, dice esta artista que se ha especializado en esta novela.

Para evitar controversias la artista se ha ceñido a la descripción que hace García Márquez de sus personajes en el libro, “no necesito interpretar, Gabo describe perfectamente cada personaje, lo coge desde los inicios de la novela y lo sigue llevando por todas sus etapas desde niño hasta que se hace viejo y los demás detalles los va a aportando el libro”, enfatiza Caicedo.

Por eso en la escena de Amaranta Buendía, esta aparece sentada tejiendo su mortaja, la misma que hizo y deshizo infinidad de veces, atrás de ella un ataúd que mandó a hacer sobre medidas, una pianola; recuerdo de su amor eterno, un italiano que pretendía a su hermana Rebeca y a quien le escribe cartas que nunca envía. Antes de morir, Amaranta se ofrece como mensajera para llevar cartas de las familias del pueblo. Esos son apartes del perfil que acompaña a este personaje de “Cien años de soledad”, elaborado por la artista pastusa.

Todos estos personajes, que le han dado la vuelta al mundo en diferentes idiomas y dialectos se pueden ver en esta exposición que reúne a 15 de los principales protagonistas del relato desarrollado en Macondo y que pareciera pudieran acceder a una segunda oportunidad sobre la tierra.