Con motivo de la semana de receso escolar, que termina el próximo lunes festivo, época en la que se incrementa el número de viajeros a sitios turísticos a los que es necesario llegar por transporte fluvial, la Superintendencia de Puertos y Transporte anunció nuevos operativos de inspección en cuerpos acuáticos como lagos, lagunas, embalses y muelles.
El propósito es verificar la reactivación de la prestación del servicio público fluvial y el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad establecidos por el Gobierno nacional.
Estos operativos de control se extienden en 14 cuerpos acuáticos del país en los que el uso de chaleco salvavidas es obligatorio y las empresas deben entregar tiquetes con la información relevante de la embarcación como el trayecto, horarios, datos de la compañía aseguradora y póliza, etc.
La Supertransporte informó que cumpliendo con su función de inspección, vigilancia y control de los atractivos turísticos nacionales, en especial las zonas en las cuales por esta temporada se presenta gran afluencia de los viajeros, los operativos serán estrictos para garantizar que la reactivación económica del transporte fluvial cumpla con los protocolos de bioseguridad
Con ese propósito, la entidad viene adelantando campañas de sensibilización dirigidas a los pasajeros del servicio acuático, para que conozcan sus derechos, sus deberes y los mecanismos para hacerlos efectivos.
Semana de receso
La Supertransporte ya ha hecho presencia en 14 muelles, embalses, lagos, lagunas, lacustres, como el Embalse del Peñol, el Muelle Puerto Berrio, el Muelle de Puerto Nare, el Muelle de Calamar, el Muelle San Luis de Palenque, el Muelle de Quibdó, el Muelle turístico Arboletes, el Muelle Necoclí, la Laguna de Guatavita, el Muelle de Aipe, el Muelle de Santa Marta, el Muelle de Puerto Gaitán, la Laguna de La Cocha y el Muelle de Buenaventura.
Durante el pasado mes de septiembre, el organismo de control de transporte realizó operativos de inspección en cuerpos de agua fluviales para verificar las condiciones de reactivación de la prestación del servicio y el estricto cumplimiento de los protocolos de bioseguridad.
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En los ocho cuerpos acuáticos visitados por la entidad se socializaron los aspectos de seguridad necesarios en el transporte fluvial a 188 usuarios y 42 tripulantes de las embarcaciones.
“Es importante tener en cuenta que el transporte fluvial, también es supervisado por esta entidad. Con la reactivación de este modo de transporte y la llegada de los períodos de vacaciones, la entidad seguirá haciendo presencia permanente en lagos, lagunas, muelles y embalses. Los usuarios tendrán el acompañamiento de personal de la entidad”, explicó el Superintendente de Transporte, Camilo Pabón Almanza.
Las recomendaciones
Además de sus funciones de protección a los usuarios del transporte fluvial, la Superintendencia de Transporte estableció algunas recomendaciones sobre derechos y deberes de los pasajeros:
- La embarcación no debe tener sobrecupo.
- La empresa debe entregar información clara, veraz, suficiente, oportuna, verificable, comprensible, precisa e idónea sobre las condiciones del servicio de transporte (hora de zarpe, número de paradas en el recorrido, etc.).
- El usuario debe ser tratado en condiciones de igualdad con los demás y toda la tripulación.
- Todos los usuarios del transporte deben ser incluidos en la lista de pasajeros. Se debe recibir de la tripulación un chaleco salvavidas.
- La embarcación debe estar dotada de chalecos salvavidas, equipos de primeros auxilios, bombas de achique y demás implementos para prevenir accidentes.
- El pasajero debe recibir un tiquete que contenga el nombre de la empresa de transporte, número de Patente de Navegación de la embarcación, fecha de expedición, origen y destino de la ruta y del pasajero, hora de salida, tarifa, firma del despachador y datos de la compañía aseguradora y póliza.
- Durante el trayecto contratado, la embarcación debe contar con la tripulación mínima que establecen los reglamentos de Tripulaciones y Dotaciones de las Embarcaciones Fluviales.
- Cada pasajero debe tener una silla asignada cuando sea transportado en embarcaciones tipo lancha y/o canoa y siempre debe ocuparla durante el trayecto.
- Los usuarios con habilidades especiales tienen prioridad de acceso.
- La embarcación debe contar con un espacio para ubicar su equipaje y que el mismo le sea devuelto al final del recorrido en las mismas condiciones en que se entregó.
- No puede realizarse suministro de combustible con pasajeros a bordo de la embarcación.
- El pasajero debe cumplir las instrucciones de la tripulación.
- En caso de ocurrir un siniestro a bordo, los usuarios pueden prestar su colaboración desinteresada, activa y humanitaria en las operaciones necesarias, según las instrucciones impartidas por los tripulantes de la embarcación.
- Se prohíbe embarcar en estado de embriaguez o fumar a lo largo del trayecto.
- Está prohibido embarcar productos explosivos, inflamables y tóxicos.
- Denunciar ante las autoridades las irregularidades en el viaje.