Así va la movida para la negociación del salario mínimo | El Nuevo Siglo
El 30 de diciembre será el plazo máximo para concertar el aumento.
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Sábado, 19 de Noviembre de 2022
Redacción Economía

Comienza la cuenta regresiva para que se instale la mesa de concertación laboral, en donde se definirá cuál será el salario mínimo de los colombianos para el año entrante.

El 9 de diciembre es una de las fechas clave para esta discusión, pues todos los actores involucrados deben poner sobre la mesa su propuesta sobre el porcentaje en el que se debería aumentar el salario.

Los días 12, 13, 14 y 15 de diciembre serán las jornadas de discusión y concertación del salario mínimo del próximo año; y justo ese último día acaba el primer plazo para la concertación del monto.

Cuatro días más tarde será la presentación de las salvedades de las partes; el 22 de diciembre del estudio de las mismas y, finalmente, el 30 de diciembre será la fecha límite para acordar el salario mínimo.

Cabe recordar que el alto costo de vida al que se enfrentan los colombianos, por cuenta del alza constante en el IPC durante 2022, es uno de los temas en los que se debe basar la discusión, pues el salario mínimo sube pero la inflación seguirá su paso, según varios expertos.

La inflación anual en Colombia va en el 12,22% con corte a octubre de 2022, y se estima que el incremento del salario mínimo pueda estar cerca del 12% o 13%.

Propuesta unitaria

Francisco Maltés, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), dijo a este medio que es fundamental recuperar y mantener la capacidad adquisitiva de los colombianos.

“Estamos interesados en que haya una política del Gobierno que permita mantener el poder adquisitivo del salario. Puede haber un buen arreglo con un buen porcentaje, pero si no hay política para contener la inflación es muy complicado. Por ello vamos a plantear una serie de iniciativas para mantener el poder adquisitivo del salario”.

Vamos a presentar una propuesta unitaria la CUT, la CGT y la CTC en materia de porcentaje y de criterios, como por ejemplo controlar el precio de los servicios públicos, en particular las tarifas de energía, medicamentos, así como controlar la tasa de interés que autoriza la Superintendencia Financiera para los préstamos y, sin duda, que se controle por la vía administrativa, como se hizo en el pasado, el precio del dólar”. 

La inflación

Por su parte, Iván Jaramillo, del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, sostuvo a EL NUEVO SIGLO que “efectivamente la inflación es un criterio de ajuste y uno de los parámetros legales para fijar el aumento del salario mínimo”.

Señaló que “la orientación a la concertación constitucional y legal constituye el mejor camino para la fijación del salario, para no afectar la empleabilidad y no deteriorar el poder adquisitivo de los trabajadores ad portas de la anunciada recesión económica”.

Además, dijo que “es conveniente seguir la ruta de desvinculación del salario mínimo como criterio de ajuste de bienes y servicios, vinculándolo a la función de piso mínimo de remuneración nacional”.

Respecto a la inflación, el Ministerio de Hacienda, en cabeza de José Antonio Ocampo, ha dicho que el Gobierno ha tomado algunas medidas para mitigar los choques sectoriales que han incrementado los precios de los alimentos, como la reducción temporal de aranceles, el apoyo a pequeños productores para la compra de insumos agrícolas, mejoras en las cadenas logísticas para reducir los costos de transporte e instrumentos financieros para apoyar al sector agrícola.

Frente a la tasa de cambio dijo que el Gobierno continuará fortaleciendo mensajes unificados en torno a aquellas políticas que puedan afectar el flujo de divisas hacia la economía colombiana en el futuro cercano, contribuyendo a mitigar presiones adicionales alcistas sobre el tipo de cambio.

Empresarios

Por su parte, los empresarios han manifestado que se deberá tener en cuenta no solo la inflación, sino también el impacto de la reforma tributaria, la volatilidad del dólar, la reforma laboral y una posible recesión de la que en su momento habló el presidente Gustavo Petro para el 2023.

Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, sostuvo que “el salario mínimo podría aumentar un 13% por efectos de la inflación, pero si se vuelve político puede ser mayor. Y si a eso le sumamos los costos que va a impactar la reforma laboral anunciada, eso significa, según Fedesarrollo, un 12% en los costos laborales, más salario mínimo, estamos situándonos por encima del 27% en crecimiento en los costos laborales”, agregó Cabal.


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Entre tanto, Bruce Mac Master, presidente de la ANDI, dijo que es importante mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, pero sin afectar la capacidad de maniobra y crecimiento de las empresas, que en últimas son las principales generadoras de empleo en el país.

“Solo hasta el mes de diciembre se conocerán las propuestas en firme del porcentaje que debe subir el salario mínimo a partir del 1 de enero del próximo año, y se deben tener en cuenta variables como inflación causada, proyectada y productividad”, indicó Mac Master.

Gobierno

Cabe recordar que la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, sostuvo que “el Gobierno nacional todavía no contempla nada porque las cifras con las que se elabora la propuesta para el aumento del salario mínimo, deben ser las del último día del mes de noviembre, donde se conocerá el costo de vida, que es la inflación, más el proceso de la productividad. Después de eso nos reuniremos en una mesa de concertación con el Gobierno y el 5 de diciembre empezará el forcejeo de la negociación”.

Por el momento se han conocido las declaraciones de Diego Guevara, el viceministro técnico de Hacienda, quien dijo que el salario mínimo para el 2023 podría quedar entre $1.100.000 y $1.150.000.

Sin embargo, indicó que aún hay “mucho camino por recorrer” en estas conversaciones que incluyen también a los empresarios y líderes gremiales.

Gobierno anterior

El Gobierno anterior subió el salario mínimo para este año en 10,07% para que llegara a $1 millón. De acuerdo con cálculos del Banco de la República, esto significó un aumento real de 3,25%, es decir, el incremento por encima de la inflación pasada. Por su parte, el índice de productividad para el 2021 fue de 1,19%, importante teniendo en cuenta que es uno de los datos que se tomarán en cuenta en la ecuación que dará como resultado el alza del salario mínimo mensual.

Para el 2019 el índice de productividad fue de 0,21%, el salario mínimo de 828.116, es decir un aumento del 6% respecto al año anterior, mientras que para el 2020 este índice estuvo en -0,6%, El salario mínimo para ese mismo año fue de $877.802, con un incremento del 6%.

Desindexar del salario productos y servicios

El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, planteó algunas opciones que se implementaron y otras que se pondrán en marcha para mitigar altas presiones inflacionarias.

De acuerdo con el jefe de la cartera, “una mayor inflación y aumentos en el salario mínimo podrían dar lugar a un proceso de indexación de precios a estas variables. El Gobierno ha avanzado en la identificación de algunas actividades, bienes y servicios que podrían ser desindexados del salario mínimo, principalmente en los sectores de agricultura, educación, servicios públicos, transporte, vivienda, entre otros”.

Cabe recordar que el ministro se refirió a este tema en la pasada rueda de prensa del 17 de noviembre, cuando se concilió en Cámara de Representantes la reforma tributaria. Sostuvo que “en la última reunión de consejo de ministros se acordó desindexar del salario mínimo todos los productos. Algunos por Ley y otros por decreto”.  

“Es una decisión que tomamos, y esto quedaría atado a la inflación básica”, añadió Ocampo.

Esto lo que significa es que el porcentaje de aumento del salario mínimo no debe verse reflejado en los incrementos de servicios ajenos.

En este sentido, Iván Jaramillo, del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, insistió en que “uno de los factores de mejora de la capacidad adquisitiva de los trabajadores y de los ciudadanos es que no haya factores adicionales de inflación”, como los que suelen establecerse si no se desvincula el Smmlv de estos productos y servicios.