En lo que va corrido del año hasta el mes de octubre, el país ha recibido US$7.767 millones por cuenta de remesas de trabajadores colombianos desde diferentes partes del mundo.
El ingreso de remesas se ha convertido en ingreso significativo para la economía del país, pues es dinero con el que las familias de estos trabajadores cubren gran parte de su canasta familiar, pagan deudas o adquieren productos y servicios.
De acuerdo con Camilo Herrera, presidente de Raddar, las remesas, la generación de empleo y la adquisición de tarjetas de crédito y otro tipo de créditos han contribuido a tal punto que la inflación no afecta tanto en el consumo de los colombianos; sin embargo, insiste en que hay que tener en cuenta que el gasto de los hogares en todo el país es diferente al gasto de cada hogar en particular.
Este año los analistas prevén que las remesas podrían llegar a US$10.000 millones. Este ingreso ha beneficiado a por lo menos 20 millones de personas residentes en el país o al 40 % de la población colombiana. Esta sería una cifra histórica, pues en 2021 llegaron US$8.597 millones, mientras que en 2020, año de la pandemia, los ingresos por ese rubro fueron de US$6.908, y en 2019 las remesas ascendieron a US$7.086.
Dólar
El alza del dólar sin duda ha sido uno de los factores predominantes para que se envié más dinero del exterior y a su vez haya más recursos en el país por cuenta de las remesas. Cada vez son más los colombianos que deciden dejar el país y hacer vida alrededor del mundo buscando empleos que les permiten sostenerse, ahorrar y enviar dinero a sus familiares. En lo corrido de 2022 la moneda norteamericana ha sido un punto clave a favor de quienes envían y reciben estos dineros, pues con el alza de la moneda, los mismos dólares que recibían a principios de año, ahora representan mucho más en pesos colombianos.
La divisa estadounidense ha alcanzado máximos históricos este año. Es cierto, la devaluación del peso de alguna manera beneficia a las familias que en todo el país han logrado recibir US$5.000 e incluso más por cada dólar que llega a sus cuentas.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el envío de remesas ahora es mucho más fácil y seguro, factor que puede estar contribuyendo al aumento de ingresos desde el exterior, pues en la actualidad son varias las plataformas que se suman al envío de remesas. Ahora solo basta con descargar una aplicación para que en minutos llegue dinero desde Estados Unidos, España y Chile, países en donde hay más trabajadores colombianos, a territorio nacional.
Banco Unión, Éxito, Global66, Coomeva y Nequi son algunos de ellos. Según Giovani Velázquez, director de canales alternos del Grupo Éxito, aseguró que el diferenciador es que logran “monetizar el tráfico”. “Trabajamos en un ecosistema de servicios que les permita a las personas resolver necesidades cotidianas transaccionales”, dijo. Aseguró además que las remesas son usadas en su mayoría para cubrir necesidades básicas como comprar comida y pagar arriendo y servicios.
Según el Banco Mundial, el envío de dinero a través de los operadores de telefonía móvil es menos costoso (3,5 %), pero los canales digitales representan menos del 1 % del volumen total de las transacciones.
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Regiones
De acuerdo con el Banco de la República, el departamento del Valle del Cauca fue el que más recibió remesas en el tercer trimestre del año, con un total de US$622,42, millones, seguido de Antioquia con US$400,46 millones.
Cundinamarca por su parte recibió en el mismo periodo US$413,62 millones y Risaralda US$122,37 millones. De acuerdo con el Emisor, todos los departamentos tuvieron mayores ingresos por remesas desde Estados Unidos, seguido de España y Chile.
De acuerdo con el Banco Mundial, las remesas son una fuente esencial de ingresos para los hogares de los países de ingreso bajo y mediano. Alivian la pobreza, mejoran los resultados nutricionales y están asociadas a un mayor peso al nacer y tasas de matriculación escolar más elevadas entre los niños de hogares desfavorecidos. Los estudios indican que las remesas ayudan a los hogares receptores a fortalecer su resiliencia, por ejemplo, a través del financiamiento de una vivienda más adecuada, y les permiten afrontar las pérdidas después de un desastre.
Panorama en la región
Según el organismo, las remesas a los países de ingreso bajo y mediano enfrentaron factores adversos en el ámbito mundial en 2022, pero experimentaron un crecimiento aproximado del 5 %, hasta alcanzar los US$626. 000 millones
Se calcula que el flujo de remesas creció 9,3 % en América Latina y el Caribe, 3,5 % en Asia meridional, 2,5 % en Oriente Medio y norte de África y 0,7 % en Asia oriental y el Pacífico, según cifras del Banco Mundial. Además, “en 2022, por primera vez un país individual, India, va camino a recibir remesas anuales por valor de más de US$100.000 millones”, afirmó el organismo.
Se estima que las remesas a América Latina y el Caribe han aumentado 9,3 % en 2022, hasta alcanzar los US$142.000 millones. Los datos correspondientes a los primeros nueve meses de 2022 indican un aumento de 45 % para Nicaragua, 20 % para Guatemala, 15 % para México y 9 % para Colombia. Esto impulsado principalmente por el crecimiento del empleo de los migrantes latinoamericanos en Estados Unidos.
A su vez, las remesas recibidas por migrantes en tránsito también contribuyeron a flujos sólidos en México y América Central. Las remesas, como porcentaje del PIB, superaron el 20 % en El Salvador, Honduras, Jamaica y Haití. En 2023, es probable que las remesas tengan un crecimiento más moderado, del 4,7 %, debido a las perspectivas económicas menos favorables en Estados Unidos, Italia y España. El costo de enviar US$200 a la región ascendió, en promedio, al 6 % en el segundo trimestre de 2022, en comparación con el 5,6 % registrado el año anterior.
Por su parte Michal Rutkowski, director de la Práctica Global de Protección Social y Trabajo del Banco Mundial, sostuvo que “los migrantes contribuyeron a atenuar la rigidez de los mercados laborales en los países anfitriones mientras ayudaban a sus familias a través del envío de remesas. Las políticas inclusivas de protección social han ayudado a los trabajadores a capear las incertidumbres en materia de ingresos y empleo creadas por la pandemia de covid-19. Dichas políticas generan impactos mundiales a través de las remesas y se deben seguir aplicando”.