El primer ministro británico David Cameron pedirá al parlamento sumarse a los bombardeos contra el Estado Islámico en Siria, según una respuesta escrita a la comisión parlamentaria de Relaciones Exteriores.
"Debemos tomar la decisión de extender los bombardeos británicos contra el Estado Islámico en Siria", dice el texto, horas antes de que el primer ministro intervenga en el parlamento para plantear en persona su demanda. Hasta ahora los británicos participan sólo en los bombardeos en Irak.
"Es un error que el Reino Unido delegue su seguridad a otros países y espere que sean las tripulaciones de otras naciones las que asuman las cargas y los riesgos de golpear al Estado Islámico en Siria para detener el terrorismo en el Reino Unido", agrega el documento, en referencia a los bombardeos que llevan a cabo Estados Unidos, Francia y otros países.
"Una cosa está clara: las amenazas a nuestros intereses y a nuestro pueblo son tan grandes que no podemos permitirnos quedarnos al margen y no actuar", se justifica en su respuesta.
Cameron sostiene que la aportación británica a la campaña bélica "ayudaría a la coalición a perturbar más efectivamente las líneas internas de comunicación del Estado Islámico, incluyendo dificultarles que se muevan hacia el sur y amenacen a Jordania".
"La acción británica ejercería presión en el Estado Islámico ahí donde se sienten más seguros y contribuiría a erosionar el mito del califato", concluye Cameron.
Se espera que Cameron someta al voto del parlamento la participación británica en los bombardeos, más de dos años después de que una rebelión en sus filas conservadoras le impidiera participar en una acción militar contra el presidente sirio Bashar al Asad por haber usado armas químicas contra la población civil.