“La vida es como montar en bicicleta. Para mantener el equilibrio, debes seguir moviéndote “. Anónimo
Indudablemente el deporte centenario con más arraigo popular y participación de nuestros jóvenes es el ciclismo. Además de ser un vehículo de movilización popular utilizado en todo el territorio nacional.
La bicicleta apareció en Alemania en 1817 y fue llamada "máquina de correr" y "caballo de diversión" y desde su invento se convirtió tanto en medio de transporte para unos como en elemento de trabajo para muchos otros.
Hace 40 o 50 años el anhelo de todo niño era aprender a montar en bicicleta y tener la propia. Y para el deportista nato, su aspiración era participar en una de las famosas vueltas a Colombia, que se iniciaron a finales de 1950.
En el campo femenino empezaron las competencias en 1958, representado para Colombia títulos mundiales en la pista con María Luisa Calle, en 2006.
Efraín Forero fue el primer campeón nacional, en enero de 1951.
El ciclismo nacional nos ha dado muchas glorias entre muchos otros, Cochise Rodríguez, Lucho Herrera y Fabio Parra y mi apreciado paisano Nairo Quintana. Resalto a otro gran protagonista del ciclismo nacional, Rigoberto Urán.
Traigo estos comentarios a raíz del accidente sufrido por nuestro gran ciclista Egan Bernal, quien en sus entrenamientos recibió fracturas comprometedoras en su cuerpo al chocar a 50 kilómetros por hora con la parte trasera de un bus. Él iba en una posición habitual de ruta, con la cual el deportista se concentra en el movimiento de sus piernas y no tiene mucha visibilidad de lo que sucede alrededor.
Destaco la gran solidaridad nacional e internacional que ha recibido nuestro gran pedalista y la forma profesional y oportuna como lo atendieron los médicos que lo intervinieron. Ahora nuestras plegarias por su pronta recuperación y que pueda retornar a las competencias internacionales.
El mensaje que nos queda es que conductores, ciclistas y autoridades debemos aunar esfuerzos, para que no haya más muertes en nuestras vías. 300 ciclistas muertos en carreteras es una demostración de falta de previsión, imprudencias, señalizaciones e implementos luminosos que permita a los conductores visualizarlos.
Se podría pensar en construirles unas vías en las cuales puedan entrenar sin riesgos de ser atropellados.
Cierro mi nota con un pésame por la muerte del niño Julián Esteban, de Zipaquirá, el niño que soñaba ser como Egan y por los cientos de ciclistas muertos en las vías de nuestro país.
Y a nuestros conductores un llamado a la solidaridad con nuestros ciclistas que arriesgan sus vidas por darnos glorias y triunfos en el exterior. Recomendemos a conductores respetar los límites de velocidad, conducir sin efectos del alcohol o cansancio, tener la revisión mecánica del vehículo, y teniendo en cuenta que "cada ciclista tiene derecho a un carril de acuerdo con la ley 1811, pero esta norma no se cumple.
La bicicleta es una insignia de deporte y trabajo en las tierras colombianas y en ellas va un ser humano, cuidémoslo. Ánimo Egan.