Brillante semestre económico

Durante  el segundo semestre de 2012 el balance de la Comisión Tercera del Senado que con gran orgullo presido, no puede ser más positivo. Logramos convertir en Ley entre otros, 5 proyectos que serán cimientos para garantizar una economía sana, que permitirá la creación de más empleo formal  y continuar por la senda del crecimiento económico. 

Iniciamos con la aprobación del Presupuesto Nacional para el 2013, cuyo monto será el más alto de la historia $ 185,5 billones; al igual que batimos la cifra de inversión alcanzando los 45 billones que representan 6 puntos del PIB. Con estos recursos de lograr combatir la corrupción se disparará el sector productivo.

El segundo proyecto tramitado fue el de traslados presupuestales; dándoles así combustible a las diferentes locomotoras; dejando al sector agropecuario, por primera vez, con la fuerza necesaria para transformarse; de igual forma se le dio un espaldarazo al Ministerio de Obras y Transporte dotándolo con los recursos necesarios para hacer el mantenimiento de la red terciaria y adelantar las obras de infraestructura y saneamiento básico para recuperar el tiempo perdido.

La tercera Ley clave fue aprobar los diez mil millones de dólares de cupo de endeudamiento.  Así el Gobierno garantiza los recursos para poder responder en los próximos años los compromisos adquiridos. Es un stand by que se utilizará en el momento que se requiera sin que estas divisas ingresen al país, pagando directamente los compromisos en el exterior para evitar problemas de revaluación.  Su objetivo  es poder afrontar los efectos de las crisis internacionales y problemas de liquidez.

La Cuartanorma tramitada fue el presupuesto de regalías por valor de $ 17.7 billones, descentralizando estos recursos para dinamizar las regiones y solo podrán ser utilizados  en proyectos macros que tengan impacto regional y que estén incluidos en el Plan Nacional de Desarrollo o en los Departamentales. Los proyectos se discutirán en las OCAP, gobernadores y alcaldes no podrán destinar recursos para obras politiqueras, porque de hacerlo el Gobierno podrá vetarlos.

Por último, la reforma tributaria, fundamental para lograr equidad, progresividad y eficiencia. Por primera vez se logro una reforma que propende por la generación de empleo, cambiando la estrategia asistencialista, por la de disminuir los costos al sector productivo y exportador, con lo cual los hace más competitivos para enfrentar la revaluación galopante. Se les garantizó al ICBF y al SENA, la seguridad de contar con los recursos para su funcionamiento, no sólo para cumplir la sentencia que obliga a pagar el salario mínimo a las 70 mil madres comunitarias sino para modernizar dichas instituciones. Pasamos de  impuestos a la nómina, como son los parafiscales, a que sean los sectores mineros y de capital los que financien estas entidades al igual que la educación superior, la salud y el sector agropecuario con el 9% del CREE.

No se tocaron productos de la canasta familiar y no declararán renta más del 96% de los colombianos. Los honorarios de menos de $ 3’700.000 no se gravan con retención en la fuente; la medicina prepagada baja del 10% al 5% en cuanto al IVA; la cadena de productos del sector agropecuario bajó al 5%. Adicionalmente regulamos con mano fuerte la elusión y paraísos fiscales entre otros.

 Les ganamos el pulso a sectores intocables, para disminuir desigualdades e inequidad y el Congreso mostró que cuando  quiere se puede.

^{*Senador de la República}