A la mitad del periodo del actual Gobierno se presenta un remezón ministerial por decisión del presidente, a fin de sintonizar su gabinete con sus propósitos políticos y con una ejecución más dinámica.
No fue sorpresa el relevo en el Ministerio del Interior, pues con los escándalos de corrupción y confrontaciones en la alta dirección del Estado, se presentaba un desgaste con el ministro que aparecía salpicado con todo, hasta con el fuego amigo del que se queja la primera dama.
Pero llama poderosamente la atención el mensaje del presidente en su cuenta X (Twitter), donde anuncia su salida: “Hacen encuestas mentirosas para detener el poder constituyente. El próximo Ministro del Interior realizará los contactos necesarios para que se concrete el poder constituyente en este o en el próximo gobierno...”
Por más que el presidente realice un juego de palabras, entre constituyente y poder constituyente, la realidad es que el poder constituyente se convoca precisamente para que se manifieste en una Asamblea Constituyente y ésta tiene como objetivo reformar la Constitución.
Es precisamente el punto que no se ha dicho; ¿Para qué es la Asamblea Constituyente? Definitivamente no se convoca por que fracasan ciertas reformas propuestas por el presidente al Congreso; la reforma a la salud, no es objeto de reforma constitucional, a lo sumo legal; cosa distinta es que haya sido mal concebida y mal vendida a los colombianos, pero es problema no se arregla con constituyente. La pensional ya se aprobó, al igual que la jurisdicción agraria. La reforma laboral ya dijeron que la sacaran por decretos, luego, la tal movilización del poder constituyente nada tiene que ver con las reformas.
Al excanciller Leyva se le soltó para qué es la constituyente que busca el Gobierno, tiene que ver con la “paz total”, pues de acuerdo con la Constitución actual que acogió en su texto los Acuerdos de La Habana, con los disidentes como la Nueva Marquetalia, no puede hacerse proceso alguno, ya perdieron su oportunidad y no pueden gozar de los beneficios de los acuerdos, justicia transicional, penas simbólicas y JEP. Tampoco el Clan del Golfo y otros grupos delincuenciales pueden acceder a esos beneficios, no hacen parte de los acuerdos y la amnistía; y el indulto según la Constitución vigente son para delitos políticos y los de ellos, distan mucho de serlo. Por esto es que tienen que reformar la Constitución y para eso es que quieren movilizar el poder constituyente.
El tema es de la agenda de todo el Gobierno, pero muy especialmente de los ministerios del Interior y de Justicia; por ello también se cambia al titular de esa cartera. Hasta el momento, no se vio siquiera un proyecto de lo que debe ser la reforma a la justicia; está en discusión de eméritos; pero tampoco creemos que un jurista le camine a esa idea de constituyente. Sin embargo, el mensaje de despedida fue bastante diciente: “¡Con Usted por siempre Presidente Gustavo Petro! ¡Gracias por la oportunidad de aportar un grano de arena por el cambio de este país de la belleza en el que construiremos la justicia!”. Bueno, al menos se asegura la Defensoría del Pueblo.