DIEGO ARANGO* | El Nuevo Siglo
Jueves, 9 de Octubre de 2014

Robo de celulares

 

Cuando salieron los celulares para el servicio de la gente, nadie se imaginó que este útil aparatico se fuera a convertir en el tiempo en una de las mayores industrias del delito. El robo de celulares ha alcanzado unas dimensiones insospechadas. Informes de las autoridades aseguran que cada minuto se roban dos celulares en Colombia, solo en Bogotá en lo corrido del año van cerca de 350 mil celulares robados y en el país supera el millón de aparatos. No solo se da la modalidad de la sustracción mediante el famoso cosquilleo, está el raponeo, el asalto desde las bicicletas, en motos, carros y a pie. Muchas personas han sido asesinadas por quitarles el celular, otras gravemente heridas y algunas más han quedado discapacitadas por ataques de los delincuentes.

No hay límite para este delito, los ladrones no se inhiben ante nada, solo buscan alcanzar el objetivo del robo a cualquier precio sin importarles absolutamente nada. Pero lo más curioso de todo ello es la ingenuidad como también la irresponsabilidad del usuario, que muchas veces se vende mostrando su celular en las calles, en los buses y Transmilenio. No entiendo cómo las chicas se colocan el celular en los  bolsillos traseros o delanteros exhibiéndolo e invitando al ladrón a ir por él. Otros casos de personas hablando distraídamente por la calle de manera indefensa donde son víctimas del raponazo o del atraco. El popular dicho "dando papaya".

El robo de celulares se ha convertido en un grave problema para la sociedad y la razón es simplemente porque es un negocio de grandes proporciones, en el que según dicen las autoridades, participan desde los más vulgares ladronzuelos, hasta bandas sofisticadas y bien preparadas, además de comerciantes establecidos y hasta  la complicidad de empleados de las operadoras que trabajan internamente para rehabilitar nuevamente los aparatos reportados robados para el comercio ilegal. En todo caso el grave problema del robo a los celulares se ha convertido en una gran industria multinacional, que se ha extendido pues el tráfico de estos aparatos robados se realiza en todo el continente, desde Colombia hasta Argentina, pasando por todos los países. Es un asunto de prestarle atención por parte de las autoridades internacionales.

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*Presidente Canal Teleamiga Internacional