DIEGO ARANGO* | El Nuevo Siglo
Domingo, 11 de Marzo de 2012

La caída de la Fiscal

Como un hecho singular en el país el Consejo de Estado emitió un fallo a una demanda interpuesta por un estudiante de derecho en contra de la formalidad de la elección de la fiscal Vivian Morales. El alegato consistió en que ella fue elegida con 14 votos de los 23 magistrados actuantes en ese momento y no de los 25 que son reglamentariamente.

En este país leguleyo y santanderista, los abogados le sacan la punta al lápiz a su interpretación; sucede que el mismo Consejo de Estado que tumbó a la Fiscal por fallas de quórum, eligió entre ellos a magistrados con los mismos defectos. De manera que la interpretación de las normas la hacen los juristas según el marrano. En este caso le tocó a la Fiscal, quien por ese hecho no tiene nada que ver, pues ella es más bien víctima de una interpretación errónea por parte de la Corte Suprema de Justicia que la eligió. Ella ha pagado el error de sus electores y ellos tranquilos, pues no hay nadie que le muestre los dientes a la Corte.

Pero a un lado de esta falta de seriedad jurídica está que la Fiscal estaba resultando incómoda en investigaciones de fondo contra altos funcionarios del gobierno Uribe, en la que se había excedido en las acusaciones, pues no cabe en la cabeza que personas que le sirvieron al país como Bernardo Moreno o Luis Carlos Restrepo sean consideradas un peligro para la sociedad y se encuentren privados de la libertad, lo que no indica que las investigaciones no continúen su curso. No es el caso de Andrés Felipe Arias quien es acusado de favorecimiento a terceros con dineros del Estado. Pero hay otro aspecto que compromete a la Fiscal y es su relación con Carlos Alonso Lucio, personaje controvertido y quien ha estado vinculado de alguna manera con la guerrilla, los narcotraficantes, los paramilitares y los contratistas públicos, todos ellos enemigos del país. Lucio es hoy un hombre distinto, se convirtió en cristiano, predica en una iglesia evangélica y su pensamiento es diametralmente opuesto al que tuviera años atrás. De manera que aunque la presentación pública de la Fiscal con su controvertido esposo es asunto que atañe a su ética, no se puede presumir que sus fallos serían influidos por él, tampoco que exista un complot uribista para sacarla del cargo. No, a mi manera de ver lo que sucedió se debe a la inconsistencia jurídica de las altas cortes y la interpretación acomodada que dan a asuntos de gran importancia para la vida nacional.

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*Presidente Canal Teleamiga Internacional