Frecuentemente la historia de la Universidad del Rosario ha trascendido en aquellos temas que son de especial relevancia para el país, no solo por la pertinencia que tiene en la formación de los estudiantes, sino por los aportes que desde la Academia pueden hacerse para el futuro de Colombia.
Por su claustro han pasado ilustres héroes de la independencia, en los últimos siglos, eximios rectores, como José Vicente Castro Silva, Antonio Rocha Alvira y Carlos Holguín, entre otros.
Este breve recorrido histórico nos obliga a destacar la figura de Carlos Holmes Trujillo, que gracias a la designación que le hicieron los rectores Hans Peter Knudsen y José Manuel Restrepo en la coordinación de los debates académicos, culturales y políticos, le prestó invaluables servicios a la Universidad y a la comunidad internacional.
Su gran inteligencia, ecuanimidad, liderazgo y patriotismo, lo llevaron a ocupar las más altas dignidades del Estado. Como Alto Comisionado de Paz en el gobierno de Samper, tuvo la posibilidad de rectificar con audacia la política de paz, de emprender un nuevo proceso de negociación política para superar la violencia.
Propuso, entre otros temas, la expedición de un verdadero estatuto de la oposición y una reforma electoral que sirviera para abrir espacios distintos al bipartidismo. También la depuración de las Fuerzas Armadas, el retiro de quienes han participado en la violación de derechos humanos.
En el año 2015, Carlos Holmes Trujillo, excandidato a la Vicepresidencia, lanzó la propuesta en un foro organizado por el diario El Tiempo, la Universidad del Rosario, entre otras instituciones, titulado: ¿Cómo refrendar los acuerdos de la Habana? Habló de los mecanismos que se podrían aplicar para la refrendación de los acuerdos de paz, que existen en la Constitución, entre los que mencionó la consulta popular y el referendo, en consecuencia, que hubiera un “gran acuerdo político de Estado” para que existiera un mecanismo nuevo que avalara lo pactado en Cuba, el cual sería, una “consulta refrendaria”.
En Junio 4 del año 2018, como columnista de opinión en El Nuevo Siglo expresaba: “Los problemas que está generando la implementación del acuerdo Santos-Timochenko, se habían advertido. La idea era modificar algunos puntos del dicho acuerdo con varios propósitos…Se apuntaba a que el texto final estuviera aislado de la batalla política que estaba a punto de iniciarse…Infortunadamente ese punto patriótico no se alcanzó…Estamos de cara a una gran oportunidad para el país. Se tuvo cuando ganó el “No”, pero, infortunadamente, desapareció por la arrogancia de los negociadores de los dos lados de la mesa”.
Ya como Ministro de Defensa, las aves de rapiña sedientas de poder, quisieron devorarlo, haciéndole un debate de control político y moción de censura, para mostrarlo como su trofeo ante el gobierno de turno, pero Carlos Holmes Trujillo salió airoso de las garras de la oposición.
Lleno de gloria, Dios se lo llevó al trono celestial, donde estará “más allá del bien y del mal”.