Como decía mi abuelo: “el mundo es un pañuelo”, significa que la pandemia Covid-19, la rebaja en los precios del petróleo, la subida del dólar y el aumento del desempleo, ha colocado a todos los seres humanos en igualdad de circunstancias
Los árabes situados a miles de Kilómetros, con sólo una picadita de ojo nos pusieron a sudar petróleo, produciendo grandes impactos en una depresión económica, tanto en Colombia como en el mundo entero.
Millones de hogares verán desaparecer ingresos y ahorros engrosando las filas de la pobreza, la quiebra de los incontables negocios traerá una recesión que tardará muchos años en recuperarse.
Mauricio Puerta lo registra muy bien en esta frase: “nuestro cuerpo pertenece al tiempo, no a nosotros”.
Los ciegos de entendimiento caminarán por la vida como un trascurrir día a día, pero los observadores acuciosos descubrirán un nivel más profundo, logrando el acceso al flujo de la sincronicidad de sus semejantes que yacen en el núcleo de la existencia.
Tal como escribió León de Greiff su poema “Balada del mar no visto”, sentía en sus fibras del alma los encantos del mar, a pesar de que nunca observó ni palpó realmente esta maravilla “Viajero de las noches embriagadas; nauta / de sus golfos ilímites, /de sus golfos ilímites, delirantes, vacíos,/ -vacios de infinito…,vacíos…-Dócil nauta / yo soy,/ y mis soñares derrotados navíos…./ Derrotados navíos, rumbos ignotos, antros / de piratas….¡el mar! /Mis ojos vagabundos / -viajeros insaciados-conocen cielos, mundos, / conocen noches hondas, ingraves y serenas, / conocen noches trágicas, / ensueños deliciosos, / sueños inveracundos…/ Saben de penas únicas, / de goces y de llantos, / de mitos y de ciencia, / del odio y la demencia, / del dolor / y el amar...! ¡/Mis ojos vagabundos, / mis ojos infecundos…: / no han visto el mar mis ojos, / no he visto el mar!
Así es nuestro peregrinar por la vida, aunque hablemos diferentes idiomas, profesemos filosofías opuestas, unos creyentes y otros no, morenos, blancos, rubias de ojos azules, lo que sucede en un extremo del planeta se percibe instantáneamente en todos los puntos cardinales.
Comprendamos que en el mundo se produce una integración a gran escala, se integran los conocimientos, la información, las prácticas económicas, comerciales, sociales y culturales.
Cuando el presidente Donald Trump retiró a su país del acuerdo de París sobre cambio climático, se produjo una serie de consecuencias fatales en el mundo para todos los seres humanos.
Ninguno puede ser indiferente ante los fenómenos mundiales, inundaciones y sequías, devastación de las selvas amazónicas, contaminación del aire, del suelo y de las aguas serán amenaza permanente en nuestra vida.
El cambio climático ha descongelado la capa de hielo en un 40% de la superficie polar en la tierra. Lo que hagamos en los próximos 20 años determinará el futuro del mundo natural y también el futuro de la humanidad.
Ojalá no tengamos que gritar en el futuro ¡sálvese quien pueda!