Estos robots voladores, vehículos aéreos no tripulados,  (VANT), por sus siglas en español,  manejados a distancia,  aparecieron hace diez y seis años, están por todas partes, tienen diferentes usos, los vimos en el último mundial de futbol en Brasil sobre los estadios mostrando  el juego; en Rusia e Israel  ya se utilizan en los envíos de pizza; se ha demostrado su importancia en zonas azotadas por desastres naturales, permiten llevar ayudas;  a poca altura detectan a personas perdidas en bosques o montañas; en Argentina se emplean con el objeto de sobrevolar terrenos declarados al fisco como baldíos y sin embargo construidos; sirven en  vigilancia fronteriza,  trabajos agrícolas, control de incendios forestales, arqueología, geología, biología,  como satélites; los niños juegan con ellos, se ven encima de parques y playas,  obstaculizan la operación aérea en aeropuertos; es imposible prohibirlos, al mundo se lo han tomado los drones, en China hubo dos mil quinientos  en la celebración de la llegada del 2020, existe mínima reglamentación respecto de su manipulación,   tamaños y precios disminuyen, preocupa su empleo por organizaciones delincuenciales, el Estado Islámico, por ejemplo, ha cometido numerosos atentados en diferentes sitios del planeta.

Reflexiono respecto del  tema enterado de que un despiadado militar de Irán, el general  de división Soleimani, jefe de la fuerza  Al Quds, encargada de las incursiones  exteriores de los Guardianes de la Revolución,  enemigo declarado de los Estados Unidos,  fue abatido por un dron cerca del aeropuerto de Bagdad,  Irak, en compañía de otros ocho uniformados, por orden del presidente de los Estados Unidos Donald Trump, quien dice que el procedimiento se hizo necesario porque  se preparaba una acción inminente contra funcionarios y ciudadanos norteamericanos,  lo cual  produce   inquietud ante la amenaza  de   represalias anunciadas por Irán, “se contestará en el momento y lugar apropiado”. 

Crecen las tensiones en Oriente Medio. Es posible que el mandatario compruebe la urgencia de su determinación para evitar inminentes actuaciones demenciales pero  me pregunto si hay claridad respecto de  la utilización de drones por parte de gobiernos, -democráticos o dictatoriales-,  e igualmente   de movimientos  extremistas desconocedores del  valor de la vida, aun cuando anoto que los drones se inventaron con fines militares, recuerdo la primera misión con participación de un artefacto de tal naturaleza  efectuada el 23 de enero del 2009. 

Los drones surcan el mundo y desconozco de qué manera será posible regular su uso. En los cinco continentes millones de personas elevan drones con distintos propósitos sin control alguno. En las fiestas de matrimonio reemplazan al arroz. Es indispensable definir hasta dónde vamos a llegar con tan novedosos aparatos que ojalá contribuyan a la consecución de la paz, no a la guerra