El cambio fue de trescientos sesenta grados; de un silencio cómplice en el que se venía sobre lo que está ocurriendo en el proceso electoral en Venezuela, pasamos la semana pasada a un pronunciamiento de la Cancillería, que marcaba un cambio de rumbo, cuando se dijo: Las garantías políticas y electorales para todos los actores políticos por igual, constituyen un eje fundamental en el marco de la democracia y por esto, Colombia se une a los llamados de la comunidad internacional sobre la necesidad de priorizar el actual proceso político electoral presidencial como mecanismo democrático para la toma de decisiones que afectan y tendrán incidencia en la vida del Pueblo hermano de Venezuela durante los próximos años”.
Ahora, es el presidente Petro quien directamente anota en su discurso: “Inhabilidad de María Corina Machado es un golpe antidemocrático, pero en Colombia pasa lo mismo”.
Los primeros en aplaudir el nuevo rumbo presidencial fueron los vecinos del norte: “Yo creo que el apoyo por parte del presidente Petro a la posibilidad de registrar o inscribir los candidatos de la oposición es algo importante. Las palabras del presidente Petro en la región tienen mucho peso y es importante escuchar lo que dice”, señalo Brian Nichols, Subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos.
Queda para la reflexión y el análisis el remate de la expresión presidencial, cuando asegura que “en Colombia pasa lo mismo”. Sin duda se refiere a su vieja rencilla con la Procuraduría General de la Nación, cuando siendo Alcalde de Bogotá, el procurador Ordoñez, autoridad administrativa, con funciones disciplinarias, lo destituyó de la alcaldía y tuvo que pedir la intervención del sistema interamericano, para que avalaran su posición, en el sentido que, de acuerdo con el Pacto de San José, solo autoridades judiciales pueden destituir a un funcionario elegido por voto popular.
Como ya es conocido su estilo confuso, “a Dios rogando y con el mazo dando”, pasa a agregar lo siguiente: “A la señora María Corina Machado y a otros se les inhabilitó para participar de campañas electorales por autoridades administrativas, previamente. Problema, en Colombia pasa lo mismo, aquí como una especie de doble moral, atacamos lo que hacen allá porque indudablemente es un golpe antidemocrático, pero ocultamos que aquí también se hace”.
No la baja el Presidente contra la Procuraduría, lo extraño es que hasta el momento no la haya mencionado en los temas que quiere abordar en su constituyente, precisamente para suprimirla o al menos quitarle las funciones jurisdiccionales que recientemente se le dieron, para “torcerle el pescuezo al ganso” a la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Remembremos que a María Corina Machado, candidata opositora barrió en las primarias venezolanas y los sondeos la daban como la única candidatura que podía derrotar a Nicolás Maduro, sin embargo, recibió una inhabilidad de 15 años para participar en elecciones; intentó postular a Corina Yoris como su candidata, pero un extraño fallo del Consejo Nacional Electoral de Venezuela impidió la inscripción.
Tan equivocado está el régimen de Maduro, que sus viejos compinches, como también Luis Ignacio Lula del Brasil, han tenido que criticarle su postura en estas elecciones.