La más destacada mujer en la historia literaria de Colombia ha sido la tunjana Sor Francisca Josefa de la Concepción Castillo y Guevara, Toledo Niño y Rojas, conocida como la Madre Castillo, quien vivió de 1671 a 1742 y fue la gran exponente del barroco neogranadino.
Durante la Revolución de los Comuneros del siglo XVIII, Manuela Beltrán rompió los carteles que decretaban más impuestos, conocida esta alcabala como la “Armada de Barlovento.
Más tarde, en 1812, el 6 de diciembre, nació en Sonsón, Antioquia, doña María Martínez de Nisser, llamada la “dama soldado”, primera mujer en publicar un libro social en Colombia: “Diario de los sucesos de la revolución en la provincia de Antioquia en los años 1840 - 1841”, avalado por la Editorial Incunables y, reconocida como “precursora nacional de los actuales movimientos por la dignificación y la igualdad de la mujer”. Otras mujeres jugaron un papel trascendente en la Independencia como “la Pola”, Policarpa Salavarrieta; Mercedes Abrego de Reyes en Cúcuta; Carlota y María del Rosario Armero en Mariquita; Rosa Zárate en Tumaco; Antonia Santos Plata y su esclava Juana; Juana Ramírez y Engracia Salgar en el Socorro; Agustina Mejía en Guapotá; María del Tránsito Vargas y Leonarda Carreño en Guadalupe; Evangelina Díaz y Fidela Ramos en Zapatota; Marta Tello, Joaquina Aroca y Luisa Trilleros en Natagaima; las “Juanas”, que seguían al Ejército del Libertador, etc.
En 1852, para reemplazar a José Hilario López, se votó por Sixta Tulia Pontón Piedrahita, viuda del general Santander, la primera candidata a la Presidencia de la República, a la que seguiría en 1974 María Eugenia Rojas, “La capitana del pueblo”.
En el siglo XX, fueron destacadas líderes Ofelia Uribe de Acosta, Rosa María Otálora de Corsi, Carmen Medina de Luque; Josefina Valencia de Hübach, senadora y miembro de la Asamblea Nacional Constitucional de 1954; Esmeralda Arboleda de Uribe, primera mujer en ser Ministra de Comunicaciones; la primera estudiante universitaria del país en la carrera de medicina de la Universidad Nacional de Colombia, Gerda Westendorp; Gabriela Peláez Echeverry, la primera abogada de Colombia en 1941, compañera de las hermanas Carmen y Soledad Gómez Garzón.
María Carulla, quien fundó en 1936 la primera escuela de trabajo social en la Universidad del Rosario; Maestras como Virginia Gutiérrez de Pineda y su discípula y aliada Ligia Echeverry Ángel quienes realizaron estudios sistemáticos de la familia, la niñez de la calle y la vejez; Sofía Ospina de Navarro, promotora de la formación social y luego, su cuñada, Bertha Hernández de Ospina Pérez, una de las primeras senadoras de Colombia; Aydée Anzola Linares, primera magistrada y luego presidenta del Consejo de Estado; Alegría Fonseca, una de las primeras representantes a la Cámara y líder ambientalista; la poetisa Elisa García de González (Gloria Dall); así como de otra gran mujer conocida en México donde estuvo radicada desde 1939: “Laura Victoria”, seudónimo de Gertrudis Peñuela de Segura, quien falleció en 2004; todas ellas integrando ese amplio elenco combativo y luchador, de la mujer colombiana.