GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 13 de Abril de 2014

Visión

 

Empieza el examen de Por qué fracasan los países. Los orígenes del poder, la prosperidad y la pobreza (Deusto, Bogotá, 2013) de Daron Acemoglu y James A. Robinson;  aparecen, al principio, opiniones de distinguidas personalidades, en particular académicas y ganadoras del Premio Nobel en Economía, asimismo, definiciones y términos que comienzan a tener acogida y uso y, luego, conceptos que llaman la atención. Se seguirá el orden indicado.

El primer grupo conduce a pensar que la preparación más adecuada, en relieve decreciente, para el estudio del desarrollo económico y sus logros es la formación en ciencias políticas, economía e historia; la política señala el marco,  la orientación y las reglas, la economía se entiende con la correspondiente ejecución y la historia permitirá la evaluación y retroalimentación. Quien escribe estudió la segunda disciplina, la tercera es una afición y no se ha instruido en la primera. George Akelof considera que el texto examinado alcanzará una dimensión similar a la de La riqueza de las naciones, de Adam Smith, en el largo plazo.

En cuanto a definiciones y términos, las instituciones políticas y económicas, y su combinación, juegan un papel fundamental y, también, las elites y la clase dirigente. Las instituciones son políticas y económicas y se dividen en inclusivas (la más conveniente) y extractivas; la primera categoría conlleva la actuación libre de los individuos, seguridad, propiedad privada, sistema jurídico imparcial, servicios públicos para todos, firma de contratos, entrada de empresas nuevas, escogencia de profesiones, aumento de productividad, competencia, derechos de propiedad seguros, libertad de contratación, adecuada  autoridad central, mercados, innovación, nuevas tecnologías, comercio, transporte, educación, industrialización, incentivos, igualdad de oportunidades, libertad y democracia. Las instituciones extractivas significan lejanía respecto a los rasgos señalados y han predominado a lo largo de la historia. El lector ha de observar que la lista previa (no pretende ser exhaustiva) incluye instituciones políticas y económicas.

Lo ideal: mezcla de instituciones políticas y económicas inclusivas porque crean mercados de la misma variedad; prevalecerá lo extractivo, en conjunto, si alguna (s) de las instituciones son de esta clase. Quien posea el poder (trátese de individuos o coaliciones) ganará los conflictos institucionales; el resultado de los roces  puede modificarse con el tiempo. Despierta la atención que los medios de comunicación empiezan a usar la terminología señalada al igual que   las organizaciones  gubernamentales.