JUAN MANUEL CORZO ROMÁN | El Nuevo Siglo
Lunes, 11 de Marzo de 2013

La contralora

 

Con ocasión a los ataques que recibiera la Contralora General de la República, una de las altas funcionarias del orden Nacional, amerita hacer unas importantes reflexiones sobre el momento que vive el país y las discusiones y el rumbo político que deben escoger los colombianos. Las circunstancias y las causas de los ataques a Sandra Morelli, merecen una revisión, ya que no son únicamente subjetivas, obedecen a que esta institución ha pisado cayos en los negocios públicos más grandes del país y que han sido razón de lesión enorme en perjuicio de la Nación, es decir, de todos los colombianos.

Lo investigado por la Contraloría no es más ni menos entre varios casos que: el debate de la Salud, propuesto por quien escribe este artículo, discusión que destapó la crisis que vive el sector y dejó en evidencia los billones de pesos destinados para otros fines; el lesivo contrato de Cerro Matoso, su prórroga y los daños ambientales; las investigaciones por el caso de InterBolsa y la procedencia de los dineros captados, entre otros. Estamos hablando de los gigantescos casos de corrupción en Colombia.

El país se distrae y se deja persuadir con otros debates como las campañas políticas venideras y no nos centramos en el verdadero vicio de nuestra democracia, la corrupción,  que ha sido combatido por una liberal de tiempos modernos, fiel a sus principios y que  parece sacada del pensamiento futurista de John Stuart Mill, quien compartía la sentencia de Kant quien señaló una vez: “del retorcido tronco de la humanidad no ha salido nunca nada derecho”. Mill creía profundamente en esta afirmación.

La ascendencia hacia la opinión pública que forma una masa tan grande de influencias hostiles a la individualidad y que es agredida por antiliberales reconocidos, no tiene otro argumento que atacar a la señora Contralora, que ha luchado contra la corrupción, implica de ella la disconformidad de la mera repulsa de hincar la rodilla ante la costumbre de quienes se ven y se han visto enredados en temas de acceso al poder por vías non santas y con fines perversos.