El archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, aún está superando la catástrofe causada por el huracán “Iota”.
Como se dice popularmente: “después de la tormenta viene la calma” y surgen candidatos que prometen devolver la confianza trabajando incansablemente por su pueblo amado.
Por ello, es necesario destacar una muy importante mujer, Katia Elena Outten Lynton quien, por su trabajo y dedicación a la comunidad, aspira a ocupar la silla gubernamental de San Andrés, Providencia y Santa Catalina en las próximas elecciones regionales, oportunidad para hacer realidad los sueños de la comunidad raizal, en estos nuevos tiempos de renacimiento del archipiélago.
A Katia Elena Outten Lynton, líder comunitaria, se le identifica plenamente por ser la benefactora de la fundación Denti Sonria IPS.
Ella piensa que la cultura raizal está desapareciendo debido a la superpoblación, por lo cual se ha dificultado el desarrollo de las comunidades del archipiélago.
Se requiere por tanto diseñar estrategias para el control de la entidad OCRE (Organización control y Circulación de Residencia) de acuerdo con el Decreto 2762 de 1991 que adopto medidas para controlar la densidad poblacional en el departamento, ante el alto índice demográfico.
Espera reestructurar igualmente las falencias existentes en salud, turismo, movilidad y educación.
En salud, luego de la transición del hospital a una ESE (Empresa de Salud del Estado) “seguimos viviendo regularmente, por cuanto no se cuenta con un hospital de cuarto nivel, el cual disminuiría la cantidad de remisiones, mejorando así la atención a los pacientes, lo que garantizaría un mejor acompañamiento de sus familiares en sus propias viviendas”.
En cuanto a la seguridad alimentaria, afirma: “estamos limitados, ya que los alimentos son traídos en avión, unos de Estados Unidos, otros desde Centro América”.
Otro de los problemas, es la existencia de barrios con una población vulnerable abandonada por el gobierno local.
En su programa de gobierno Katia Elena Outten plantea la necesidad de dar oportunidades a la juventud, creando una universidad departamental, estableciendo convenios con otras universidades y fomentando la educación virtual.
Hay que fortalecer los deportes, como el béisbol y el baloncesto, que constituyen la estructura física de los jóvenes, ellos con su fortaleza han obtenido premios a nivel nacional e internacional.
Los escenarios deportivos deben habilitarse, creando escuelas de formación especial, comprometiendo al gobierno local para ubicar a los jóvenes en un nivel profesional.
Las playas, “eje medular de nuestro departamento, se encuentran descuidadas. Es urgente pensar en una conservación ambiental, para que el turismo se convierta en punto de referencia internacional, estableciendo una marca región que nos identifique culturalmente ante el mundo, a partir de conceptos como la biosfera y el mar de siete colores”.
El gobierno abandonó la plataforma submarina, lo que ha facilitado que otros países exploten nuestros recursos, arriesgando la seguridad departamental, hay dificultad para adquirir el pescado, resultando más económico consumir pollo.
“Dado que la constante ha sido el descuido de las instituciones, se impone una reingeniería urgente y necesaria”, sostiene esta mujer que espera el respaldo ciudadano para hacer posibles los múltiples y ambiciones planes que tiene para esta región colombiana.