Se conmemora dentro de dos meses el sesquicentenario de la Academia Colombiana de la Lengua, la más antigua de las corporaciones americanas, establecida en mayo de 1871 por un grupo de lingüistas y escritores de gran prestigio, entre ellos don Rufino José Cuervo, padre de la filología hispanoamericana, y don Miguel Antonio Caro, latinista y jurista de innegables virtudes.
Numerosos escritores, poetas, novelistas y ensayistas del país, al igual que los más importantes lingüistas, se han sentado también en sus sillones y, en el ámbito de la crítica literaria, ha contado con las figuras de Marco Fidel Suárez, “Príncipe de las letras colombianas”> y, familiarmente, no puedo dejar de reseñar la presencia en la Academia de mi abuelo materno, el historiador antioqueño Julio César García Valencia, padre de la educación superior universitaria en Latinoamérica, Fundador y primer rector de la Universidad La Gran Colombia; y de su primo, el jurista Jorge Vélez García, quien presidiera durante muchos años la Academia Colombiana de Jurisprudencia.
A lo largo de su historia, han formado parte de la Academia Colombiana de la Lengua, destacados miembros de la política y de la cultura nacional, al igual que un destacado grupo de intelectuales extranjeros, honrados con el título de individuos honorarios. Desde 1960, la corporación asesora oficialmente al Gobierno de Colombia en materias idiomáticas y ha propiciado que se aprueben varias leyes a favor de la lengua española. La Colombiana fue anfitriona del III Congreso de Academias de 1960, en el que se presentó y se firmó el Convenio de Bogotá, también denominado “Convenio Multilateral Asociación de Academias de la Lengua Española”, donde se reconoce, con la firma de los cancilleres hispanoamericanos, en nuestro caso del Ministro de Relaciones Exteriores, don Julio César Turbay Ayala, el carácter internacional de la Asociación de Academias de la Lengua Española, creada en México en 1951 y ratificada en el II Congreso, efectuado en Madrid en 1956.
Luego de la suscripción de la Carta de Bogotá, el Presidente de la República de Colombia, don Guillermo León Valencia Muñoz, en virtud de la Ley 11 de 1963 que aprobó el “Convenio Multilateral Asociación de Academias de la Lengua Española”, realizó el depósito legal de este instrumento internacional que se encuentra vigente, no obstante la propuesta de 1994 de Fernando Lázaro Carreter, como Presidente del X Congreso de Academias de la Lengua, realizado en Madrid, donde se propuso incluir en ASALE a las academias de Filipinas, Puerto Rico y Estados Unidos de Norteamérica, a las cuales, en este siglo XXI se sumarán las academias Guineoecuatoriana y Ladina de Israel.
El futuro de la Academia Colombiana de la Lengua ha quedado, desde la semana anterior, en cabeza de su Junta de Gobierno, integrada para un nuevo período estatutario por los siguientes académicos:
Director, don Juan Carlos Vergara Silva; subdirector, don Eduardo Durán Gómez; secretario, don Edilberto Cruz Espejo; subsecretaria, doña Cristina Maya; bibliotecario, don Álvaro Rodríguez Gama y, tesorero, don Bogdan Piotrowski.